Caracas, 14 de enero de 2016.- El presidente de la República, Nicolás Maduro, informó que el precio del petróleo venezolano se ubicó este martes en 24 dólares por barril, lo que representa el nivel más bajo registrado en los últimos 12 años.
La disminución en el precio de los hidrocarburos, tiene un efecto importante en la economía nacional, ya que las exportaciones petroleras constituyen la principal fuente de ingresos de divisas con que cuenta el Estado para impulsar el desarrollo social y económico del país.
En proporción, de cada 100 dólares que entran a la nación, 96 provienen de la renta petrolera. En condiciones favorables, cuando suben los precios del petróleo ingresan más dólares y aumentan las reservas internacionales, mientras que al caer los precios de la cesta petrolera, la cantidad de divisas que entra al país es menor, lo que disminuye los recursos con los que cuenta el Estado para continuar impulsando el desarrollo socio económico nacional.
La producción actual de crudo y de líquidos de gas natural (LGN) del país supera los 3 millones 800.000 barriles por día, de los cuales 2 millones 400.000 barriles diarios se comercializan en el mercado mundial.
Si estas exportaciones se calculan a un promedio de 100 dólares por barril ingresarían al país, un total de 240 millones de dólares diarios; pero si el petróleo se comercializa a 24 dólares por barril, la cifra disminuye a 57 millones 600.000 dólares por día.
De acuerdo con las estadísticas del Ministerio de Petróleo y Minería, durante el 2015 el crudo venezolano registró un promedio de 44,65 dólares por barril, lo que representa la mitad de la media de 66,42 dólares por barril que mantuvo en 2014.
Producto de esta caída en el precio del petróleo, la nación perdió el 68 % de los ingresos en divisas en 2015, tal y como informó el jefe de Estado, el pasado 12 de diciembre, en una alocución al país.
Impacto en la industria petrolera
La baja en la cotización del crudo tiene un impacto directo sobre las inversiones que debe emprender Petróleos de Venezuela (Pdvsa), cuyos costos de producción por cada barril de crudo oscila entre los 8 y los 19 dólares, dependiendo de la zona en donde se extraiga el petróleo y de acuerdo a su densidad medida en grados API (American Petroleum Institute), que determina que tan liviano o pesado es.
Asimismo, tiene un efecto negativo sobre los proyectos estratégicos que debe emprender la empresa estatal para impulsar el crecimiento de la producción de crudo en el país.
De hecho, las mayores inversiones dentro de la Industria se realizan en las áreas medulares de exploración y producción, refinación y gas, para lo cual se destina un monto de 30 mil 978 millones de dólares.
Guerra de precios
Desde mediados de 2014, el precio de los hidrocarburos en el mercado internacional ha caído progresivamente, al pasar de un promedio de 100, a menos de 30 dólares por barril, como consecuencia del aumento de la producción de gas y petróleo de esquisto, por parte de los Estados Unidos.
Esta acción cumple un propósito político de inundar de crudo el mercado internacional de hidrocarburos para ocasionar la caída de los precios, y a la vez, afectar las economías de los países exportadores de hidrocarburos, que se oponen a sus intereses hegemónicos, como es el caso de Rusia, Irán y Venezuela.
En este sentido, el presidente Nicolás Maduro señaló el pasado martes al firmar la convención colectiva de los trabajadores de Petróleos de Venezuela que Estados Unidos "apuesta a quebrar la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep) y el imperio ha logrado colocar estos precios para intentar ahogar a los países independientes que producimos petróleo y que estamos decididos a ser libres e independientes, soberanos y no nos vamos a poner de rodillas a los intereses transnacionales".
A esta situación se ha sumado la negativa de algunos miembros de la Opep de reducir el techo conjunto de producción establecido, y el temor sobre la ralentización de la economía de China y las naciones europeas, que pudiera mermar la demanda de crudo.
Ante este escenario de baja en la cotización del crudo, el presidente Maduro instruyó el pasado martes al ministro de Petróleo y Miinería, Eulogio Del Pino, liderar junto con los miembros de la Opep y los países que no forman parte del bloque, un nuevo plan de acción para recuperar los precios de los hidrocarburos.
Durante su participación en la conferencia número 168 de la Opep que se celebró en Viena, Austria, en diciembre de 2015, el ministro venezolano planteó la necesidad de que los países miembros del grupo redujeran en 5% su nivel de bombeo conjunto para respetar la cuota estipulada de 30 millones de barriles diarios, con la finalidad de evitar una caída más abrupta de los precios.
"Tenemos que reducir la producción en la Opep en al menos 1,5 millones de barriles diarios, de lo contrario el precio continuará cayendo. Lo que estamos proponiendo es hacer algo para buscar un precio que reconozca las inversiones que se hacen en el sector petrolero y que permita la estabilidad del suministro energético del mundo", indicó en esa oportunidad.
Del Pino, quien representa a Venezuela ante la Opep, también ha llamado al resto de los miembros del grupo a aplicar estrategias conjuntas que permitan estabilizar el mercado, y lograr el paulatino ascenso del precio del crudo a un promedio de 88 dólares por barril, que garantice la sostenibilidad de la producción petrolera.
Economía productiva
A pesar del duro escenario económico, el Presidente Maduro ha dicho que la reducción de los ingresos provenientes de las exportaciones de crudo representan una oportunidad para que Venezuela diversifique su economía e impulse su crecimiento industrial como vía para superar el rentismo petrolero impuesto por los gobiernos de la Cuarta República.
Por ello, Maduro instó este martes a la clase trabajadora y a todos los sectores del país a liderar la construcción de una nueva economía productiva de la nación.
El mandatario informó que ha venido preparando con el nuevo equipo económico "líneas estratégicas para que Venezuela aproveche esta oportunidad, para el desarrollo de una economía productiva, para iniciar una revolución económica".
"Hay que hacer un gran esfuerzo para generar nuevas fuentes en divisas convertibles en dólares, un gran esfuerzo nacional y estamos listos para hacerlo, lo estamos haciendo, vamos a incrementar el ritmo (...) hay que asumir una nueva cultura del trabajo", afirmó.
RPA