Cecily McMillan, activista del movimiento Ocupa Wall Street (OWS), fue detenida en marzo de 2012 en el parque neoyorquino Zuccotti tras golpear a un policía. El altercado —según ella explicó— fue el resultado de una reacción instintiva y en defensa propia luego de que el agente del orden le agarrara un pecho provocándole hematomas y varias marcas de agresiones en su cuerpo. No obstante, McMillan ha sido declarada culpable de asalto en segundo grado.
El caso de la activista ha tenido una importante resonancia en las redes sociales, donde insisten en que quien debería enfrentar un juicio es precisamente el oficial en cuestión por el excesivo uso de la fuerza. Así, miles de personas rechazan el veredicto de la justicia estadounidense, ya que consideran que el delito de McMillan fue atreverse a resistir de manera pacífica las acciones represivas de las fuerzas policiales.
Cabe recordar que en marzo de 2012 miles de activistas protestaban en EE.UU. contra la desigualdad entre ricos y pobres. En aquellas manifestaciones las fuerzas del orden detuvieron a más de 2.600 personas no sin que los expertos en derecho lamentaran la represión policial que, mantienen, violaba las normas internacionales de derechos humanos. (Que pensaran los seudo-gringos Venezolanos)