En apretado resumen la trama involucra a las empresas venezolana
Tecnofrenos Cumana, la panameña Tecnobreaks y las españolas GALLAECIA
INVERGEST y Epalisticia.
La trama legal en torno al comprador del
centenario diario caraqueño El Universal ha quedado develada con la
sorpresa de que la única accionista de Epalisticia es una compañía
panameña creada en 2011 por una familia de origen andino, propietaria de
un taller de frenos en Cumana, estado (provincia) Sucre, en la costa
oriental de Venezuela.
Carlos Velazco Mora y su hijo Carlos Odín Velazco Cuello aún no salen del “shock” que le causó enterarse que en la trama ellos podrían considerarse los propietarios del diario fundado por el poeta Andrés Mata, casualmente oriundo del mismo estado Sucre.
A estas alturas no dudan en asegurar que la utilización de su compañía Tecnobreaks (un erróneo intento de colocar en inglés la denominación Tecnofrenos) fue por la vía de la usurpación. No hay autorizaciones ni poderes legales otorgados a terceros para hacer operaciones por cuenta de la compañía.
Por lo pronto el padre ha anunciado que acudirá a la Fiscalía venezolana para denunciar los hechos y pedir una investigación, ya que teme que la anomalía pueda perjudicarlo a él y a su familia.
Mientras que en Panamá su hijo intentaba desde la noche del jueves localizar al abogado que tramitó el registro y hasta el mediodía de ayer no lo había localizado, según informó Velazco Mora.
La revelación de la familia Velasco indica en forma contundente que tras la operación de adquisición del medio venezolano hay algo opaco, y sería lo único que explicaría el uso fraudulento de una compañía ajena y propiedad de un pequeño comerciante que “ni trabajando 100 años y viviendo tres veces” podría acumular el capital requerido para esa transacción.
Por lo demás una conexión como la planteada descarta la tesis inicial de una compra tutelada por el chavismo o por alguien muy cercano al menos. La familia Velazco no tiene parecido con el chavismo y no ahorra críticas a la gestión del Gobierno Bolivariano relacionadas con la escasez y la inseguridad.
En apretado resumen la trama involucra a las empresas venezolana Tecnofrenos Cumana, la panameña Tecnobreaks y las españolas GALLAECIA INVERGEST y Epalisticia.
Mientras que las personas implicadas son los Velazco en Venezuela, y el banquero Eduardo López de la Osa Escribano, el abogado Jose Antonio de La Torre López (con intereses en el sector gráfico español) y el corredor de capitales de riesgo José Luis Basanto Otero, en España.
(Correo del Orinoco)
Carlos Velazco Mora y su hijo Carlos Odín Velazco Cuello aún no salen del “shock” que le causó enterarse que en la trama ellos podrían considerarse los propietarios del diario fundado por el poeta Andrés Mata, casualmente oriundo del mismo estado Sucre.
A estas alturas no dudan en asegurar que la utilización de su compañía Tecnobreaks (un erróneo intento de colocar en inglés la denominación Tecnofrenos) fue por la vía de la usurpación. No hay autorizaciones ni poderes legales otorgados a terceros para hacer operaciones por cuenta de la compañía.
Por lo pronto el padre ha anunciado que acudirá a la Fiscalía venezolana para denunciar los hechos y pedir una investigación, ya que teme que la anomalía pueda perjudicarlo a él y a su familia.
Mientras que en Panamá su hijo intentaba desde la noche del jueves localizar al abogado que tramitó el registro y hasta el mediodía de ayer no lo había localizado, según informó Velazco Mora.
La revelación de la familia Velasco indica en forma contundente que tras la operación de adquisición del medio venezolano hay algo opaco, y sería lo único que explicaría el uso fraudulento de una compañía ajena y propiedad de un pequeño comerciante que “ni trabajando 100 años y viviendo tres veces” podría acumular el capital requerido para esa transacción.
Por lo demás una conexión como la planteada descarta la tesis inicial de una compra tutelada por el chavismo o por alguien muy cercano al menos. La familia Velazco no tiene parecido con el chavismo y no ahorra críticas a la gestión del Gobierno Bolivariano relacionadas con la escasez y la inseguridad.
En apretado resumen la trama involucra a las empresas venezolana Tecnofrenos Cumana, la panameña Tecnobreaks y las españolas GALLAECIA INVERGEST y Epalisticia.
Mientras que las personas implicadas son los Velazco en Venezuela, y el banquero Eduardo López de la Osa Escribano, el abogado Jose Antonio de La Torre López (con intereses en el sector gráfico español) y el corredor de capitales de riesgo José Luis Basanto Otero, en España.
(Correo del Orinoco)
