Desde
lo social se invita a la producción
El
martes de esta semana se hizo una jornada de siembra de plantas en el barrio Gonzalo Picón del municipio
Libertador, donde participaron niños y niñas de diferentes edades
La Oficina de Atención al Ciudadano (OAC), del
Centro de Investigaciones de Astronomía “Francisco J. Duarte” (Cida), adscrito
al Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, y la Unidad
Comunitaria del Instituto Nacional de Investigaciones Científicas (Ivic), unen
esfuerzos para orientar a las comunidades merideñas en el tema de la
agroecología.
Es así como se organizan a favor del pueblo,
para que los habitantes de los sectores dentro de su radio de acción, se
beneficien con actividades que los ayuden a minimizar el impacto de la guerra
económica y el bloqueo de los EE.UU.
Como parte de ese trabajo coordinaron con voceros del Poder Popular del barrio Gonzalo
Picón del municipio Libertador del estado Mérida, una jornada de siembra de
plantas, entre ellas, tomate, pimentón, ají dulce, cebollín y cilantro, en el
patio trasero de la sede del Ivic, ubicada en la calle 42, entre avenidas
Gonzalo Picón y Urdaneta, con el apoyo del maestro pueblo Moisés Rojas del programa
“Todas las Manos a la Siembra”, quien dictó el taller práctico “El Konuco como
Agricultura de Subsistencia”.
“Konuco con K para reconocer lo nuestro, la
forma ancestral de producción agrícola”, destacó Yaneth García coordinadora de
la OAC del Cida, quien se ha sumado junto a su equipo a trabajar con las
comunidades. En esta ocasión la acompañó Gustavo González; y por el Ivic, la
coordinadora de la Unidad Comunitaria Yulibeth Ceballos.
Destacó que la ciencia debe ir de la mano de la
producción. “El Cida se está sumando al trabajo de sembrar, que sea una
cultura”, dijo, por lo que desde esta institución sensibilizan sobre el tema;
aun cuando su objetivo fundamental es otro, no es ajena al trabajo social, más
si está orientado a la producción.
Despertando la cultura de siembra
La actividad se hizo el martes de esta semana
con los niños y niñas del sector. El Maestro Pueblo explicó en forma sencilla a
los pequeños, porque la idea es despertar en ellos la cultura de la siembra,
sobre todo en estos momentos por los que está pasando el país. “Nuestro
compromiso es hacerle acompañamiento técnico a los Konucos Escolares, que hasta
hace poco se les llamaba huertos (...); trabajamos con estudiantes desde
preescolar hasta universitarios, sin descuidar los Konucos familiares y
comunales en agricultura urbana”.
El konuco no es un salto atrás, aclaró Rojas,
solo recuperan técnicas ancestrales, trabajando además con la tecnología
disponible hoy día. “Es lo que llamamos tecnología apropiada y apropiable”
dijo, destacando que en el konuco no sobra nada, lo que la gente piensa que es
monte, por alguna razón está allí; por ejemplo, la forrajera sirve para
alimentar el ganado.
“Esponjitas” que absorben todo
Los niños del sector se incorporaron en la
actividad de la mano de Rosa Márquez,
vocera del Poder Popular, contestando las preguntas que hacía el Maestro
Pueblo y haciéndole preguntas también, para luego, con sus orientaciones, pasar
a trasplantar las plántulas que había.
“Esto es una forma de que los niños de las
comunidades aprendan a cultivar una mata de tomate, pimentón, cebollín, que
ahorita están demasiado caros y hay niños que les gusta, cuidan su semillita
desde que la meten en la tierra hasta que ven la primera hoja, para ellos es
una emoción grandísima (...); los niños son como una esponjita, ellos captan
todo”.
Adamaris Colina, de 11 años de edad, una de las niñas asistentes, destacó el
aprendizaje obtenido este día. “Por ejemplo, estábamos viendo las matas,
diferentes tipos de hojas y semillas, y a la final nos dimos cuenta que hay
medicinales, para comer, también escuchamos temas como la fotosíntesis, el agua, los insectos. Estamos aprendiendo
mucho, de verdad”. (Prensa
CIDA/CS).