Posted: 22 Aug 2015 08:57 AM PDT
Purificación González de la Blanca (Ojos para la paz)
Con
la creación del llamado Estado Islámico, ISIS, o Daesh, Estados Unidos
ha logrado crear el enemigo perfecto. Un enemigo que va extendiendo por
los territorios de su interés, que amenaza también a otros países,
incluidos los europeos, y que le proporcionará apoyos muy variopintos a
la hora de combatirlo en países en los que el ejercito de los Estados
Unidos no habría podido entrar de otra manera.
Ahora
se trata de combatir a un enemigo “malo malísimo” (que degüella niños,
viola mujeres, tiñe los mares de sangre con sus fusilamientos masivos…),
o sea de salvar al mundo.
Mucho
se ha escrito ya sobre los orígenes de este engendro, que algunos
sitúan en la lucha contra los talibanes, y que se plasma en unos
acuerdos adoptados para su creación por la CIA, el Mossad y el MI6, que
lo calificaron de “avispero”, ya que tenía la finalidad de ser lanzado
contra los países en el objetivo.
Pero dejemos de dar vueltas a la noria con los orígenes porque da igual.
La
contra nicaragüense, el golpe de estado de Pinochet, la “primavera”
yugoslava, el asesinato de Ceaucescu, la “primavera” libia, Al Qaeda,
el Frente Al-Nusra, Boko Haram, el Estado Islámico/ISIS /Daesh… ¿Acaso
no han sido planificados por las mismas mentes y con el mismo objetivo
final? ¿Qué importa el momento exacto si siempre es el mismo imperio,
ahora furibundo por su inevitable decadencia?
Tantas
y tan continuadas agresiones y tanta pérdida de credibilidad han ido
dando lugar a nuevas variantes (el montaje del secuestro de las niñas
nigerianas por Boko Haram, por ejemplo), llegando los ideólogos de la
conspiración a rizar el rizo con el Estado Islámico, que ha resultado
ser el enemigo perfecto.
Hay
numerosas fotos que acreditan cómo aviones de los Estados Unidos
abastecen, supuestamente de armamento, a las tropas del Estado
Islámico; hay incluso varias en la que aparece un amplio despliegue de
tropas de ese engendro, que circulan libre y retadoramente por
territorio de Iraq llamando extraordinariamente la atención, sin
problema alguno y sin miedo a ser bombardeados.
Pero
lo más elocuente han sido las declaraciones de la ex-vicepresidenta del
gobierno de los Estados Unidos, Hillary Clinton, que en una entrevista
concedida al medio digital The Atlantic ha admitido que el Estado
Islámico ha sido creado por la Casa Blanca pero que se le escapó de las
manos. “Hemos fracasado en crear una guerrilla anti-Assad creíble… El
fracaso de este proyecto ha llevado al horror al que estamos asistiendo
hoy en Iraq”.
Para
abundar más en la cuestión, y por si hubiese duda alguna, en la
reciente detención en Alemania del ayudante de Victoria Nuland (portavoz
del Departamento de Estado de los Estados Unidos y asistente del
Secretario de Estado para Asuntos Europeos), se han puesto al
descubierto más de mil millones de dólares falsificados, de alta
calidad, impresos por Vanguard Corporation, de la que es empleado.
Este
individuo es miembro del Departamento de Estado, y ahora, durante los
interrogatorios, que pusieron bajo sospecha a Vanguard Corporación con
todas sus empresas (y a Nuland, McCain, Kerry, Brennan y otros), él
testificó que la mencionada empresa ha fabricado miles de millones de
dólares falsos de alta calidad para pagar a los mercenarios en Siria,
Irak, Ucrania, Libia, etc. y a mercenarios de Greystone e ISIS. Él da
testimonio acerca de las conexiones y los acuerdos petroleros entre
Vanguard Corporation e ISIS.
Pero
hay más. El ex-contratista de la CIA Steven Kelley declaró
públicamente hace meses que ISIS/ISIL es un grupo terrorista fabricado
realizado y financiado por la CIA en los Estados Unidos. “Este es un
enemigo completamente fabricado”, dijo en una entrevista telefónica con
Press TV de Anaheim, California, tras manifestar que Barack Obama está
bajo presión para buscar la aprobación del Congreso antes de ampliar la
campaña aérea militar de Washington contra objetivos ISIS de Irak a la
vecina Siria.
Todo
está fabricado para que la gente piense que este enemigo es algo que
hay que atacar en Siria o Iraq. El Pentágono ya ha lanzado al menos 100
ataques aéreos contra posiciones ISIS en el norte de Irak desde que
Obama autorizó el uso de la fuerza contra el grupo terrorista a
principios de este mes.
“Si
quieres llegar a la raíz del problema y eliminar esta organización, lo
primero que tienen que hacer es quitar la financiación y cuidarse de las
entidades responsables de la creación de este grupo”, dijo Kelley.
La
Casa Blanca insiste en que no necesita la autorización explícita del
Congreso para esas operaciones, ya que están destinadas a proteger al
personal y los intereses estadounidenses en el país árabe. De eso se
trata.
Con
este pretexto llevan meses sobrevolando y bombardeando Siria con sus
aviones –sin autorización alguna– y destruyendo una tras otra las
infraestructuras de ese sufrido país.
El
Presidente de Sudán también se ha sumado a las acusaciones contra
Estados Unidos por haber creado el Estado Islámico o ISIS: “Digo que la
CIA y el Mosad están detrás de estas organizaciones porque no existe
ninguna otra entidad o país que tenga interés en este tipo de grupos”,
afirmó el mandatario.
Por
otra parte, el general Wesley Clark ha declarado públicamente que el
EI fue creado por la CIA y otros servicios de inteligencia, en apoyo de
Israel.
Y
la guinda de la tarta la pone la noticia publicada el 15 de agosto de
2015 por Sputnik: El petróleo del EI se trafica en connivencia con la
OTAN.
El
grupo salafista Estado Islámico se financia mediante la venta ilegal de
petróleo, de la que extrae millones de dólares al día, mientras que la
OTAN hace la vista gorda de su contrabando. Y se remite en su
información al diario alemán DWN: “Aliados de EEUU y el Reino Unido
financian de forma secreta el grupo terrorista Estado Islámico.”
El
Gobierno regional de Kurdistán en el norte de Irak y los servicios de
inteligencia turcos han dado apoyo a las actividades de contrabando de
petróleo del Estado Islámico, además de brindarles armas y equipamiento,
según informa DWN.
De
hecho, gran parte de los recursos financieros que obtiene el Estado
Islámico vienen de la venta de petróleo. Incluso hay informes de que
empresas británicas participan en transacciones con los salafistas.
La
empresa petrolera angloturca Genel Energy, con lazos con miembros del
Parlamento británico ha recibido supuestamente una orden para
suministrar las refinerías de la empresa kurda Group Nokan.