Ministro González López hizo un llamado a los
dirigentes políticos que se han atrevido a comparar el caso con
desaparecidos y fosas comunes de otros países, a no confundir ni
pretender engañar a la opinión pública
Foto VTV
Caracas, 18 de marzo de 2016.- “Se ha determinado que en Tumeremo existe una red política-económica que recibe fondos ilegales provenientes de actividad paramilitar”, informó este viernes el ministro del Poder Popular para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Gustavo González López.
Durante un contacto informativo con VTV, donde ofreció los hallazgos más recientes de la investigación que se lleva a cabo en el sector Tumeremo del estado Bolívar, por la denuncia de desaparición de 17 mineros, los cuales fueron hallados posteriormente en una fosa clandestina, el ministro González López informó la captura de uno de los responsables que se fugó al Zulia.
Se trata de Francisco David Carache Zambrano, alias “Goliat”, dedicado a reclutar personas para trabajar en las 5 minas que estaban en control de dos bandas paramilitares. Su detención se produjo en un hotel de Lagunillas, donde fue a para tras escapar por vía aérea de Bolívar.
Asimismo, mostró los retratos hablados de mujeres y hombres que están siendo solicitados por su participación en la masacre, entre ellos varios hermanos y hermanas de Jamilton Ulloa Suárez, alias ‘El Topó’, cabecilla paramilitar ecuatoriano que planificó la matanza y también está prófugo.
Igualmente, el ministro informó que una de las víctimas halladas en la fosa común, es un ciudadano dedicado a la compra de oro, propietario de un molino para fracturar material aurífero y extraerlo de las minas. “De acuerdo a informaciones…esta persona mantenía un vínculo con una dirigente política del municipio Sifontes”, expuso el ministro.
Grupos paramilitares en conflicto:
Comentó el ministro que gracias a las denuncias de familiares y testimonios de dos testigos que fueron ubicados y protegidos, las autoridades han determinado que los responsables del asesinato son jefes de dos grupos de corte paramilitar para hacerse del control económico y político de esta zona minera, con vínculos con la dirigente política del municipio Sifontes.
Estos jefes, quienes se encuentran solicitados, son Jamilton Andrés Ulloa Suárez, Alias ‘El Topo’ y ‘El Don’, cabecilla de la organización criminal, ecuatoriano con acento colombiano, y Alixandro Lizandro González Montilla, Alias ‘El Gordo Lizandro’.
Ambos controlaban en forma ilegal la extracción de minerales en 5 minas: Hoja de Lata, Botano, Cafetal, Limón y Vuelvan Caras.
Debido a un desacuerdo entre los cabecillas de estas organizaciones paramiliares, quienes tuvieron diferencias por el cobro de vacunas y extorsiones que involucraban a compradores de oro y comerciantes en esa localidad, la situación devino en un grave altercado de los jefes de bandas y detonó en la planificación de la masacre, que ordenó el ecuatoriano alias ‘El Topo’.
Al mando de El Topo estaban 4 colabores, 3 que ya han sido capturados y quienes fueron identificados como Rueda Sobrino, y los hermanos Carlos y Manuel Balaguer, dueños de una retroexcavadora que fue usada cerca de la mina Nueva Callao para enterrar los cuerpos. La última colaboradora es hermana de ‘El Topo’, identificada como Yenny Valessa Ulloa Suáres, alias ‘La Vaca’, actualmente solicitada.
Entre los jefes de minas de ‘El Topo’, están otros de sus hermanos: Harry Ulloa Suárez, otro hermano por identificar, alias el Bernardo; otro con el alias ‘El Coro’, alias ‘El Morocho’ y por último Carlos Ortiz, alias ‘Cara e’ niña’, todos integrantes de la estructura paramilitar. En este grupo se encontraban al menos 18 sicarios contratados, comandado por un colombiano identificado como Edwin Toribio Díaz, alias ‘El Toribio’.
En la otra organización paramilitar, se identificó a Alixandro Lizardo Montilla, alias ‘El Gordo Lizandro’, quien junto a Josué Enrique Zurita Arévalo, alias ‘El Potro’, están siendo requeridos por extracción minera ilegal, extorsión y secuestro. “Esta organización paramilitar mantiene vínculos con ciertos sectores políticos-económicos y financieros en la referida zona minera y cuenta con al menos 15 sicarios requeridos por la justicia”.
Masacre planificada y ejecutada con característica paramilitar:
El ministro González López mostró un plano donde se detalla la operación ejecutada por los criminales, cuyo móvil fue el control político y económico, y que evidencia cómo fue la planificación del secuestro con más de 40 sicarios, en la madrugada del 5 de marzo, la trayectoria de los recorridos realizados, la ubicación del sitio de la ejecución y el lugar donde finalmente enterraron a la víctimas.
Los paramilitares seleccionaron planificadamente a las víctimas, que en su mayoría eran artesanos y comerciantes de oro, y dejaron vivos a dos de ellos para obligarlos a enterrar los cuerpos, y luego fueron usados como rehenes durante más de 10 días, para finalmente liberarlos ante la presión de las autoridades policiales. Estas personas son los actuales testigos, uno de ellos un colombiano en situación irregular en Venezuela, identificado como Jairo Rojas Vaca, quien fue reportado originalmente como desaparecido. Actuamente recibe protección de las autoridades junto al otro, cuya identidad fue reservada.
En Venezuela no habrá impunidad como en otros países:
El titular de Relaciones Interiores y Justicia hizo un llamado a los dirigentes políticos que se han atrevido a comparar este caso con los desaparecidos y las fosas comunes que se registran en otros países del continente, a no confundir ni pretender engañar a la opinión pública.
“Son disímiles por sus causas y la responsabilidad que como gobierno hemos asumido para que este crimen no quede impune”, respondió.
“Como nos ha instruido el presidente Nicolás Maduro, no descansaremos hasta dar con los responsables de este fenómeno paramilitar exportado de Colombia y detener a estas redes de corrupción que haciéndose del poder político de manera irregular, pretenden controlar la extracción del material aurífero en el Arco minero de la Patria”.
