Resumen Latinoamericano*, 15 de abril de 2018.-
El brasileño que la mayoría de los electores pretende llevar a la presidencia de la República en 2018 está preso; es lo que muestra la nueva encuesta Datafolha, en la que Lula aparece con el 31% de los votos, más del doble del segundo colocado, Jair Bolsonaro, que tiene el 15%; el número es menor que el de la encuesta anterior, cuando Lula tenía un 34%, pero puede haber sido afectado por la entrada de Joaquim Barbosa, que tiene el 8%, y también por toda la persecución mediática y jurídica de que Lula ha sido blanco; Lula también supera con facilidad a cualquier adversario en la segunda vuelta, sea Bolsonaro, Alckmin o Marina.
*
El brasileño que la mayoría de los electores pretende conducir a la presidencia de la República en 2018 está preso. Es lo que muestra la nueva encuesta Datafolha, en la que Lula aparece con el 31% de los votos, más del doble del segundo colocado.
El número de Lula es menor que el de la encuesta anterior, cuando tenía el 34%, pero puede haber sido afectado por la entrada de Joaquim Barbosa, que tiene el 8%, y también por toda la persecución mediática y jurídica de que Lula ha sido objeto . Lula también supera con facilidad a cualquier adversario en la segunda vuelta, sea Bolsonaro, Alckmin o Marina.
Los resultados, sin embargo, divergen de investigación Vox Populi, que será divulgada en los próximos días:
El ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva se hizo aún más fuerte después de su arresto. Es lo que muestran datos preliminares de una encuesta Vox Populi, registrada en el Tribunal Superior Electoral y contratada por el Partido de los Trabajadores. Las cifras revelan que la prisión determinada por Sergio Moro produjo un efecto contrario al deseado. Según informaciones iniciales que llegaron a dirigentes del PT, Lula fue del 40% al 43% en el voto espontáneo y del 45% al 51% en el voto estimulado. Es decir: él vencería la disputa presidencial en primera vuelta.
La identificación con el PT también pasó del 16% al 19% y la leyenda sigue siendo la más fuerte del país, con gran ventaja en relación a los partidos más directamente asociados al golpe, como PSDB y MDB.
Ante la fuerza de Lula, la estrategia de la derecha y de los grupos de medios asociados al golpe, como Folha y Abril, será intentar hacer a Lula invisible en sus investigaciones y en su noticiero. El domingo, Datafolha publica una investigación que excluye a Lula de su escenario principal, aunque nada impide que un preso -sobre todo un preso político- pueda disputar las elecciones presidenciales.
*Fuente: Brasil 247