Resumen Latinoamericano / 16 de enero de 2018 / ELN Voces
Los que saben dicen que pasan varios años antes que un pescador encuentre una perla negra, por ello son tan admiradas y valoradas. Por ser una mujer revolucionaria fuera de lo común, a la comandante Paula la conocíamos como la Perla Negra del Ejército de Liberación Nacional.
Ella nació en el Socorro, Santander… sí, en la misma cuna de Manuela Beltrán la Comunera. Desde su época de colegiala, cuando tenía 15 años, ingresó al ELN; para venir a morir en La Habana, el pasado 9 de enero, a la edad de 65 años, luego de aportar 50 años de su vida a la lucha revolucionaria por transformar a Colombia en un país digno para las mayorías nacionales.
Lo excepcional de esta comandante guerrillera es que asumió con amor y plena conciencia lo que significa ser referente como mujer revolucionaria, basado en ser ejemplo y guía de muchas generaciones de militantes a quienes buscó transformar en sujetos de cambio y revolución.
Su energía para ser la dirigente que fue, la extrajo del amor al pueblo, plasmado en su dedicación a las tareas de concientizar y organizar a los sectores populares en donde desarrolló su militancia revolucionaria.
Vivió el ser dirigente como una práctica de servicio al pueblo, que la motivó para hacer las grandes renuncias personales que hizo en aras de cumplir su compromiso revolucionario; que la llevó a vivir con la convicción de “ser capaz de hacer cualquier cosa por todos” .
Tuvo plena conciencia del gran esfuerzo que debe hacer una mujer para lograr la igualdad y remontar el machismo, tan enquistado en nuestra sociedad. Actuó a sabiendas que debía hacer un esfuerzo doble para ser aceptada como dirigente revolucionaria; que le posibilitó sacar fuerzas de donde al parecer no existían para enfrentar cada reto que le planteó la lucha revolucionaria.
Ella misma se autodefinió cuando expresó que “mi crecimiento como militante me fue llevando a nuevas responsabilidades, que fueron desviando el curso de ser una mujer tradicional” [*].
Ahora, con la partida de Paula, luego de lograr tan altas metas de calidad revolucionaria, los que le sucedemos quedamos retados para no ser inferiores a su ejemplo, de genuina mujer nueva, al estilo guevarista y en el exacto sentido de esta palabra.
[*] “Una perla negra”. Entrevista de Sinpal, noviembre de 2004. Link: http://bit.ly/2qYjGeA