19 de noviembre de 2024

EL PARNASO DIGITAL Por Federico Ruiz Tirado

 "Uno se pregunta qué harán los amigos que partieron pero que siguen en este parnaso digital. Los leo, ellos están. Algunos son poetas, Blas Perozo Naveda, Eddy Pérez, el pintor, Luis Moros; otro, periodista historiador, Martín. Uno de ellos me pregunta por mi padre, aún permanece. Fotos, palabras, pinturas  comentarios, todo lo guarda este espacio cibernético, que ya no se aguanta de tanto amigo muerto", escribió con un dejo de irremediable nostalgia mi querida Danielle Triay en su feisbu.

Kloriamel Yépez Oliveros

Ese mismo día, el 15-N, Manolo Silva, entrañable amigo mío, lanzó una recordación que a los  camaradas de Kloramiel Yépez Oliveros, como yo, nos conmovió, no solo porque  en esa fecha la inolvidable Mafalda (como se le decía a ella con afecto y animosidad, estaba de cumpleaños de nacimiento), sino porque desde que partió hacia el infinito, regresa de sorpresa como un recuerdo sonoro y un silabario de huesos, de protestas ("hormonales", como ella decía que era de la banda de comunistas que dirigió Saramago) y de rabietas que a ella misma le causaban risa.

Manolo la recordó diciendo que esa genial mujer ya no estaba entre nosotros.

¿Cómo puede estar ausente una mujer cuyo pensamiento y escritura eran y siguen siendo armas nada convencionales?, le respondí a Manolo.

A mi me ocurre con Kloramiel lo que a Danielle con sus amigos  que lucen vivos en ese aposento invisible del parnaso sideral.

En un sentido aleccionador para ambos, el Elefante Bocarriba, aquél blog personal que permanece enconchado, sin su mirada, e incluso sin su silencio, no hubiera podido llegar hasta donde llegó.

Una vez me envió un artículo muy pugnaz y por lo tanto muy bueno abordando la burocracia e indolencia del INTI y el tema de la "burguesía revolucionaria" de Castro Soteldo y yo le dije: "Yo escribí algo ya, vamos a dejarlo para luego, que la masa no tapa bollo ni tapa nada".

Lo entendió. Del otro lado del teléfono no me pidió explicación, pero tampoco hizo silencio: ya se sabe que  cierto modo de exhalación del acto de  respirar es un modo de decir, de expresar sentimientos y hasta argumentos lógicos y de aceptación compartida.

Un frasco de Cocuy que le había regalado un catador de la Sierra, que estuvo en las montañas colombianas combatiendo en filas de la FARC, ayudó en lo sucesivo a conocernos más a fondo de lo que siempre creímos.

Ese día del Cocuy se lo dedicamos al tema de los intelectuales de pacotilla y a Alfredo Maneiro y a Hugo Chávez, como pensadores del siglo XXI.