Óscar Shemel apuntó que la derecha del país cuenta con una aceptación que fluctúa entre los 17 y 20 puntos porcentuales.
La popularidad del presidente de la
República, Nicolás Maduro, se mantiene 30 puntos porcentuales arriba de
la oposición venezolana, indicó este martes el director de la
encuestadora Hinterlaces, Óscar Shemel.
En una entrevista concedida al periodista Vladimir Villegas, transmitida por la televisora Globovisión, Shemel apuntó que la derecha del país cuenta con una aceptación que fluctúa entre los 17 y 20 puntos porcentuales, al tiempo que destacó que a pesar de que existe una campaña mediática para sobrestimar las dificultades económicas del país, "los niveles de valoración positiva del presidente de la República, Nicolás Maduro, se mantienen altos".
Indicó que de acuerdo al más reciente sondeo Monitor País, realizado a una muestra de 1.200 personas entre el 24 y el 31 de mayo de este año, "47% de los venezolanos tiene una opinión positiva de la gestión de Maduro".
Señaló que incluso en el auge de las guarimbas y las acciones violentas perpetradas por la derecha desde febrero pasado, a fin de derrocar el Gobierno constitucional, la valoración positiva de la gestión de Maduro se incrementó hasta 57%.
"Frente a la amenaza de restauración de la exclusión. Se desataron los odios sociales, sobre todo de parte de las clases media y alta que compraban el discurso del odio mucho más fácilmente que otro sector de la sociedad. La valoración positiva de la gestión del presidente subió, y el país le está apostando más a las soluciones y menos a la violencia", explicó.
Asimismo expresó que "el chavismo más que un partido político constituye una comunidad emocional, una identidad de clase y una cultura política", que no olvida los logros sociales conquistados por la población en los últimos quince años.
Schemel refirió a las acciones de un laboratorio mediático que adelanta una campaña desestabilización para producir acumulación de angustia en la población con miras a un colapso social.
"Esa campaña ha tratado de hacer creer en el exterior que en el país hay una guerra civil y que la gente se está muriendo de hambre en las calles y no es verdad (...) La facturación petrolera sigue estable, el precio del crudo sigue siendo alto, los ingresos financieros continúan siendo altos, la cotización de los bonos venezolanos ha tenido récords y los compromisos de deuda se han cumplido", afirmó.
En una entrevista concedida al periodista Vladimir Villegas, transmitida por la televisora Globovisión, Shemel apuntó que la derecha del país cuenta con una aceptación que fluctúa entre los 17 y 20 puntos porcentuales, al tiempo que destacó que a pesar de que existe una campaña mediática para sobrestimar las dificultades económicas del país, "los niveles de valoración positiva del presidente de la República, Nicolás Maduro, se mantienen altos".
Indicó que de acuerdo al más reciente sondeo Monitor País, realizado a una muestra de 1.200 personas entre el 24 y el 31 de mayo de este año, "47% de los venezolanos tiene una opinión positiva de la gestión de Maduro".
Señaló que incluso en el auge de las guarimbas y las acciones violentas perpetradas por la derecha desde febrero pasado, a fin de derrocar el Gobierno constitucional, la valoración positiva de la gestión de Maduro se incrementó hasta 57%.
"Frente a la amenaza de restauración de la exclusión. Se desataron los odios sociales, sobre todo de parte de las clases media y alta que compraban el discurso del odio mucho más fácilmente que otro sector de la sociedad. La valoración positiva de la gestión del presidente subió, y el país le está apostando más a las soluciones y menos a la violencia", explicó.
Asimismo expresó que "el chavismo más que un partido político constituye una comunidad emocional, una identidad de clase y una cultura política", que no olvida los logros sociales conquistados por la población en los últimos quince años.
Schemel refirió a las acciones de un laboratorio mediático que adelanta una campaña desestabilización para producir acumulación de angustia en la población con miras a un colapso social.
"Esa campaña ha tratado de hacer creer en el exterior que en el país hay una guerra civil y que la gente se está muriendo de hambre en las calles y no es verdad (...) La facturación petrolera sigue estable, el precio del crudo sigue siendo alto, los ingresos financieros continúan siendo altos, la cotización de los bonos venezolanos ha tenido récords y los compromisos de deuda se han cumplido", afirmó.
(AVN)
