PorAlberto Pinzón Sánchez*
¿Cómo, aquel pequeño hombre de levita azul y gorra de campaña? Aquel que viene en una mula. ¿Ese es Bolívar? Dijo el empenachado jefe supremo del ejército Colonial español Pablo Morillo, cuando con más de 50 oficiales en uniforme de gala y sobre briosos caballos se disponía a recibir la comitiva de tan solo 4 hombres, que se aproximaba por la llanura polvorienta al caserío de Santana, a mitad de camino entre la villa de Trujillo y el puesto de Carache, a entrevistarse con él, (el 27.11.1.820), después de haber sido ratificados el día anterior los dos tratados, uno de armisticio y otro, redactado por el propio Bolívar sobre la regularización de la guerra, “entre los gobiernos de España y Colombia”.
Ese fantasma nuevamente a inicios del tercer milenio, vuelve a recorrer los Andes americanos y como hace 182 años provoca los conjuros con que se le ha pretendido dominar. Uno de ellos, es poner a circular en diversas y masivas ediciones un artículo “atribuido” a Marx, aparecido en el tomo III de the New American Cyclopedia enero 1.858, con el fin sacar un doble beneficio: impedir cualquier contacto o diálogo entre estos dos gigantescos hombres que pertenecen a la humanidad enfrentándolos sin bases serias, y de paso desacreditarlos mutuamente.
Es un artículo conocido en Latinoamérica, difundido masivamente en la década de los 70´s por la editorial argentina Cuadernos de Pasado y Presente nº 30. 1975, que había sido glosado desde su aparición en castellano por varios escritores. Cita como bibliografía dos fuentes inglesas: Las memorias del Gral. John Miller (1840), y las del crl Hippisley en su viaje al Orinoco (1819), además de la fuente francesa del militar Ducoudray-Holstein (1831).
Para la fecha de 1.858 según se ha podido establecer, existían artículos pertinentes sobre Bolívar en la enciclopedia americana, la británica, la francesa (encyclopédie du XIX siecle), la enciclopedia penny, el brockhaus conversation lexicon, y el dictionnaire de la conversation. Sin embargo, con la firma de Karl Marx aparece un artículo en una enciclopedia norteamericana que pone en seria duda el denso rigor científico creado por una de las mentes más privilegiadas de la época.
En efecto, la gran pregunta que surge después de leer ese artículo es: ¿ Cómo es posible que “una maquina devoradora de libros condenada a entregarlos procesados ” como el propio Marx se definía a sí mismo, y que para la fecha de la publicación del texto en cuestión, ya había escrito sus más importantes obras de filosofía y política, tenía lista las “Grundrisse” así como muy avanzada la redacción de El Capital y, 10 años antes había publicado el Manifiesto Comunista, demostrando que tenía clara la concepción dialéctica y materialista de la historia, hubiera escrito este esperpento?
Cerca de 50 yerros garrafales, que comentaré a continuación, que deforman burdamente por completo la realidad vivida por Simón Bolívar, haciendo imposible cualquier análisis serio y objetivo de su obra política y militar; no pudieron salir de la pluma de Marx, ni siquiera con las fuentes bibliográficas citadas. Por lo menos, yo me niego a darle ese crédito.
*Empecemos por el título del artículo cuyos apellidos Bolívar y Ponte corresponden a su padre y no al libertador quien se apellidaba Bolívar y Palacios.
*No viaja a Europa a los 14 años de edad, sino a los 15 y medio.
*No reside años en París, sino 2 meses.
*No asistió a la ceremonia de coronación de Napoleón en París el (02. 12.1.804), pues ese día se quedó en casa con su maestro Rodríguez.
*No regresa en 1.809 a Venezuela, sino 2 años antes, después de pasar por los Estados Unidos.
* José Félix Ribas no era su primo, sino el esposo de su tía materna. Además, el (19. 04.1.810) Bolívar estaba confinado a su hacienda del Yare por orden del gobernador colonial de Venezuela, lejos de Caracas y en consecuencia no podía rehusarse a la “revolución que estalló en esa capital el 19 de abril 1.810”. Por el contrario, fue su tendencia a la declaración de la independencia total, la que terminó imponiéndose en los hechos.
*No se retiró a la vida privada después de su regreso de Londres en diciembre de 1.810, sino que participó activamente organizando y asistiendo a las reuniones de la Sociedad Patriótica, desde donde además de orientar sobre la independencia total, allanó las condiciones para que Miranda pudiera venir a Venezuela en donde no era bien visto, dada la propaganda de ateo y masón y librepensador que habían hecho los colonialistas sobre él.
*Puerto Cabello cae en manos de los colonialistas el (30.06.1.812), por la traición de Fernández Vinoni quien les entregó por dinero la fortaleza con todo el arsenal. Bolívar lucha más de 6 días con sus tropas por recuperar la plaza y ante la imposibilidad de lograrlo, se retira a Caracas a rendirle cuentas a Miranda. No es cierto pues que los realistas estuvieran desarmados y Bolívar hubiera huido a su hacienda en San Mateo.
*Debido a la caída del fuerte de Puerto Cabello, se precipita una capitulación por parte de Miranda el (25.07.1.812), que luego el jefe colonial Monteverde desconoce al ocupar con sus tropas a Caracas 4 días después. Los dirigentes patriotas se refugian en el puerto de la Guaira, en donde existían 2 autoridades Republicanas: una militar a cargo de Manuel María Casas y otra política cuyo responsable era Miguel Peña. Como la mayoría de los militares patriotas, especialmente Bolívar, no estuvieron de acuerdo con la capitulación de Miranda, pues consideraban que el ejército patriota de más de 6.000 hombres tan difícil de organizar y armar estaba intacto especialmente en Oriente; pensaban que reagrupándolo prontamente se podría contraatacar en Caracas en donde no eran esperados. Pero para eso, era necesario despojar a Miranda del mando: Montilla, Chatillon, Carabaño, Mires junto con Bolívar se encargaron de dar un golpe en pequeño, desarmando y deteniendo a Miranda, contando con el apoyo de la autoridad de Casas y de Peña. Detenido Miranda el (31.07.1.812), sin insignias fue llevado a la guarnición comandada por Landaeta quien también apoyó el complot. Al presentarse el jefe colonial Monteverde en la Guaira, Peña traiciona a todos sus compañeros y se los entrega a todos encadenados. Bolívar logra escapar y refugiarse en la casa del magnate marqués de Casa León amigo de negocios de la familia Bolívar y respetado por los españoles, quien en los días siguientes con la ayuda del español Francisco Iturbe, amigo de Monteverde, logró obtener de este un salvoconducto para que Bolívar pudiera abandonar Venezuela. No corresponde con la realidad decir que Casas y Peña hubieran detenido a Miranda, como tampoco que Bolívar lo hubiera entregado a Monteverde encadenado.
*Tampoco corresponde con los hechos escribir que Bolívar permaneció 6 semanas en Curazao. Allí llegó procedente de la Guaira el (07. 09.1812) y se embarcó 12 días después rumbo a Cartagena, a donde arribó el (27.09.1.812), junto con otros emigrados. Es destinado el (01.12.1.812) por el gobierno de Cartagena a Barrancas (actual Calamar) con 70 hombres, no con 800 como dice el artículo, bajo órdenes del oficial francés Labatut. No marcha con Manuel Del Castillo quien era el gobernador de Pamplona, sino que es invitado por éste a concurrir a la protección de esa provincia una vez que ha avanzado por el río Magdalena derrotando las guarniciones realistas ribereñas y ha llegado a la provincia de Cúcuta.
El enfrentamiento con Manuel Del Castillo se da porque esté, apoyado en su amigo el “letrado” Francisco de Paula Santander, quiere poner bajo su jurisdicción a las tropas que traía Bolívar y, sobre todo, se oponen a la continuación de su marcha victoriosa sobre Caracas, la que califican de locura. Tampoco es cierto que viaje con su pariente Ribas a Bogotá, sino más bien, lo envía a Tunja con un mensaje para Camilo Torres presidente del Congreso Neogranadino y a Bogotá, con otro para Antonio Nariño presidente de Cundinamarca. El Congreso de Tunja no le otorga ningún grado de general a Ribas, como se escribe.
*El ejército que logra formar Bolívar durante la llamada Campaña Admirable que concluye con la toma de Caracas, combate exitosamente en Chiriguaná (01.01.1.813), Alto de la Aguada (21.02.1.813), San Cayetano (25.02.1.813), Cúcuta (28.02. 1.813), Agua de Obispos (17.06.1.813), Niquitao (02.07.1.813), realiza la maniobra de Barinas (04.07.1.813), Los Horcones (22.07.1.813), Taguanes (31.07.1.813), la cual dirigió el propio Bolívar, no Ribas, contra el oficial colonialista Izquierdo, no contra Monteverde, como lo afirma el artículo.
*No es cierto que se hubiera proclamado dictador. El cabildo de Caracas lo nombra libertador de Venezuela y le confiere el mando supremo del ejército patriota.
* Hurtado de Mendoza es el apellido de 2 malos poetas españoles de 3 siglos atrás. A quien se refiere el texto, es al gobernador político de la provincia de Caracas, Cristóbal Mendoza.
* Lo que se califica despectivamente como “escaramuzas indecisas”, fueron verdaderas batallas campales con más de un millar de soldados por cada bando, libradas durante la campaña de 1.813 a 1.814 por el control del centro de Venezuela y tuvieron la siguiente definición:
- Bárbula (29.09.1.813), victoria patriota sobre Monteverde. Muere Girardot.
- Mosquitero (14.10.1.813), victoria patriota sobre Boves y Morales.
- Barquisimeto (10.11.1.813), derrota de Bolívar y retirada a San Carlos.
- Virgirima (25.11. 1.813), victoria patriota.
- Araure (05.12.1.813), tal vez una de las más vistosas victorias de Bolívar.
- San Marcos (14.12. 1.813), victoria patriota.
- La Victoria (12.02. 1.814), victoria patriota.
- San Mateo (feb -mar 1.814), victoria patriota.
- Ocumare (20.03.1.814), derrota patriota.
- Ocachico (31.03. 1.814), victoria patriota con grandes pérdidas.
- Carabobo (28.05. 1.814), victoria brillante de Bolívar.
- La Puerta (14.06. 1.814), derrota desastrosa de Bolívar a manos de Boves y se decide la suerte de la llamada 2° república de Venezuela.
* Bolívar en retirada es derrotado nuevamente por Boves en Aragua el (17.08. 1.814), no en Arguita lugar que no existe, el (08.08.1.814) nueve 9 días antes. No se retira furtivamente por atajos a Cumaná como se escribe, sino a la ciudad de Barcelona junto con cerca de 500 hombres.
* Bolívar no pudo “embarcarse en el Bianchi”, pues este era el apellido de un corsario italiano de nombre José quien pretendió fugarse el (26.08.1.814) con el tesoro de las iglesias de Caracas en su buque insignia. Bolívar y Mariño se embarcan en una goleta rápida en su persecución hasta alcanzarlo. Sin embargo, el corsario se queda con una parte del tesoro argumentando pagarse deudas que el ejército patriota tenía por sus servicios de transporte. Dos días después al llegar al puerto de Pampatar y querer desembarcar, Piar los recibe con denuestos y les impide bajar a tierra, entonces se dirigen a Carúpano donde Ribas, el pariente compañero de Bolívar ordena detenerlos. Sacados de la cárcel por unos oficiales patriotas que no están de acuerdo, se embarcan directamente hacia Cartagena. No es cierto que Bermúdez los hubiera recibido en Carúpano porque no se encontraba allí. En el artículo se confunde el incidente ocurrido dos años después (22.08. 1.816), cuando Bermúdez sable en mano y aliado esta vez con Mariño ataca a Bolívar no en Carúpano, sino en Güira, para despojarlo del mando supremo del ejército patriota.
*Bolívar llega por 2° vez a Cartagena el (19.09.1.814) y no publica ninguna memoria. Escribió una carta en el castellano usado en esa época para tratar asuntos políticos y diplomáticos a Camilo Torres, presidente del Congreso Neogranadino que lo había facultado, explicando sus actuaciones. Al ser calificada esa carta como “memoria de justificación henchida de frases altisonantes” se da a entender que se conoció el texto o su traducción, su destinatario y su fecha. Sin embargo, el artículo confunde esta carta con la Memoria a los Neogranadinos que publicó en Cartagena dos años atrás, el (15. 12. 1.812).
*Es una gran inexactitud, escribir que Bolívar permitió a sus soldados saquear a Bogotá durante 48 horas después de su capitulación. Primero, porque el gobierno (centralista) de Cundinamarca a cargo del obstinado Bernardo Álvarez, a quien Nariño había dejado mientras combatía a los colonialistas en el sur, rechazó rotundamente esta posibilidad, razón por la cual el Congreso Neogranadino (federalista) reunido en Tunja y que constituía la autoridad aceptada por Bolívar, le ordenó tomar la ciudad de Bogotá. Esta fue tomada el (12.12.1.814), después de un encarnizado combate de dos días en el que al final hubo que luchar casa por casa, y en el cual las tropas del Congreso tuvieron más de 300 bajas. Segundo, porque al otro día apareció publicado un bando expedido por el propio Bolívar, ampliamente divulgado y documentado, en el cual se prohibía cualquier acción de represalia y se garantizaba a los bogotanos su vida y sus bienes. Esta actitud le valió el aprecio que los habitantes de esta ciudad tuvieron siempre para con él.
*A continuación el mismo Congreso Neogranadino reunido en Tunja, lo autorizó a marchar sobre el baluarte que los colonialistas tenían en Santa Marta, para lo cual debía abastecerse con las armas y municiones que le promocionaría Cartagena, ciudad que formaba parte del Congreso. Su opositor gratuito Manuel Del Castillo ahora con el mando del puerto, se negó obstinadamente a entregar cualquier ayuda, por lo que Bolívar se vio obligado a marchar sobre Cartagena. Mientras tanto Pablo Morillo quien venía con un poderoso ejército colonial de más de diez mil veteranos españoles de la guerra contra Francia, desembarca y toma la isla Margarita el (10.04. 1.814), no como lo dice el artículo 16 días antes de la realidad.
Del Castillo opone resistencia armada a las tropas del Congreso Neogranadino comandadas por Bolívar, a pesar de que Cartagena formaba parte de ese cuerpo legislativo, desde el (29.03.1.815) hasta el (08. 05. 1.815), cuando se desata una epidemia de viruela entre las tropas de Bolívar y él renuncia al mando otorgado por Tunja que era lo solicitado por Del Castillo. Se embarca al día siguiente para Jamaica. Morillo apura, llega a Santa Marta y pone sitio al puerto amurallado de Cartagena desde el (17.08.1.815) hasta (05.12.1.815), cuando este se rinde. Manuel Del Castillo es ahorcado y los principales patriotas de esa ciudad son pasados por las armas. Los demás que logran huir se embarcan hacia Haití donde son acogidos por el presidente A. Petión.
* Ribas no fue fusilado por los españoles. Mientras Bolívar estaba tomando a Bogotá, no en Jamaica como dice el artículo, el sanguinario jefe colonial Morales segundo de Boves, atacaba Maturín el (11.12.1.814), derrotando a Bermúdez y a Ribas quien huye al campo y se refugia en una pequeña casa, denunciado por un esclavo es capturado por unos merodeadores de la región partidarios del rey, quienes lo asesinan y entregan su cabeza a los jefes coloniales. Estos la fritan en aceite para conservarla y durante años la exhiben en Caracas en la picota pública como escarmiento.
*En los Cayos de Haití hubo una asamblea de los principales exiliados patriotas en marzo de 1.816, que por proposición de Brión (no de Bolívar como se escribe) lo eligieron como comandante de la expedición. Esta zarpó el (31.03. 1.816) y no el 16 de abril.
*Después de la derrota propinada por Morales a Bolívar el (14.07.1.816), los 700 colonialistas no avanzaron debido a las graves pérdidas que sufrieron, lo que es aprovechado por los patriotas para retirarse en orden e iniciar la evacuación de las armas y municiones que todavía se encontraban en la playa del puerto de Ocumare, en la goleta “el indio libre”, único buque de los patriotas anclado allí. Pero el capitán de la marina patriota Agustín Villaret los embarca en otros buques mercantes franceses que también se encontraban en el puerto.
Entonces, un reconocido traidor Isidro Alzuru, edecán de Mariño y correo de Soublette, informó falsamente que los realistas estaban ya sobre el pueblo infundiendo el desconcierto, los barcos zarparon apresurados con las armas dejando solo en la playa a Bolívar. Al rato vino el comandante de la costa de Güira Juan Videau en un bote y lo rescató. Los buques con las armas y municiones días después en Bonaire fueron rescatadas por Brión quien obligó a los piratas a devolverlas. No es cierto entonces, como lo dice el artículo que: “Bolívar después de la derrota hubiera salido al galope en un caballo, atravesando el puerto de Ocumare a toda carrera, llegado a la bahía cercana, saltado del caballo a un bote para embarcarse en la goleta Diana”.
*Cuando los colonialistas tomaron el puerto oriental de Barcelona el (05.04. 1.817), Bolívar hacía diez días había abandonado esa ciudad con sus 15 oficiales asistentes. Así que no es cierto que ese día del asalto estuviera con el gobernador Freites, como tampoco es cierto que este hubiera sido degollado como si lo fue la guarnición. Freites logró salir herido y fue capturado en las afueras de la ciudad, conducido a Caracas, se le ahorcó.
*El (20.07.1817), no se realizó ningún congreso en Angostura y menos se llamó “Congreso Supremo de la Nación”. En Angostura se establece en noviembre de 1.817 un consejo de Estado presidido por Bolívar junto con Zea, Brión y Cedeño, a quien no menciona el artículo.
*“No obstante, a fines de mayo de 1.818 Bolívar había perdido unas doce batallas y todas las provincias situadas al norte del Orinoco”. Nada más inexacto. La relación de las batallas libradas únicamente por Bolívar, durante la llamada campaña por el centro de Venezuela en el año de 1.818, es la siguiente:
-Calabozo (14.02.), Morillo evacuó la plaza y se retiró al poblado del Sombrero.
-El Sombrero (16.02.), la caballería llanera de Páez no logra derrotar completamente al jefe colonialista, pero este debe continuar retrocediendo al poblado de Villa del Cura y luego ubicarse en Valencia.
-La Puerta o río Semén (15.03.), Bolívar se retira seriamente quebrantado hacia el Guárico.
-Ortiz (26.03.), Después de 6 horas de intenso combate ambos ejércitos se retiran con grandes pérdidas.
-Rincón de los Toros (16.04.), Bolívar es asaltado en su campamento por una patrulla realista, pero logra escapar milagrosamente con vida.
-Después se ubica en San Fernando y a causa de una forunculosis glútea debe permanecer sin cabalgar. Allí se entera de las derrotas propinadas a Páez en San Carlos (26.04.) y Cojedes (02.05.) así como de la derrota de Zaraza en la Laguna de los Patos (20. 05.). Entonces se dirige a Guayana.
-Bolívar tuvo 2 derrotas; si agregamos las de Páez y Zaraza, el ejército patriota conducido de acuerdo al plan elaborado por él para ese año; tuvo 5 batallas perdidas. En ningún caso “doce”. Además, las provincias de Arauca y Casanare ubicadas al norte del Orinoco las conservaron los patriotas.
*Bolívar no encontró al “letrado” F. P Santander en Angostura. Su primer encuentro fue en el poblado de La Grita en mayo de 1.813, cuando amenazó con fusilarlo porque como vimos, con su amigo Manuel Del Castillo se opuso a la marcha admirable sobre Caracas. Después lo recogió en los llanos de Barcelona en abril de 1.817, cuando venía reñido con Páez a causa de la mezquina disputa lugareña por el poder sobre las tropas en Arauca, la cual se vino a concluir 13 años después cuando se disolvió la Gran Colombia.
*Después del Congreso de Angostura, “Bolívar puso en pie un nuevo ejército de aproximadamente catorce mil hombres con lo cual pudo pasar a la ofensiva”. Desconcertante afirmación; pues ni siquiera sumadas las tropas de los dos bandos 6.200 del ejército colonial de Morillo, con los 5.000 del ejército Patriota se llega a la cifra dada en el artículo.
*Bolívar salió de Angostura embarcado por el Orinoco hacia el río Apure a encontrarse con Páez el (02.03.1.819) no el 24 de febrero. Llegó a Araguaquen el (10.03.1.819) con 450 infantes de la legión extranjera y 100 venezolanos.
* Los revolucionarios batieron a Morillo y La Torre en Achaguas y los hubieran aniquilado SI Bolívar hubiese sumado sus tropas a las de Páez y Mariño”. Condicional muy extraño en la literatura de Marx, en todo caso muy difícil de realizar por los supuestos falsos en los que se basa. Veamos: Después de varias acciones de desgaste, los llaneros Apureños aglutinados por Páez derrotan la caballería de más de mil jinetes comandados por Morillo en presencia de Bolívar el 02.04.1.819) en el sitio denominado las Queseras del Medio situado a más de 70 Km. de Achaguas; poblado a donde se retira el jefe colonial para seguir retrocediendo luego hasta Calabozo. Mariño después de las derrotas propinadas por Morillo en sus territorios de Güira en 1.817, continuaba obstinado oponiéndose al mando de Bolívar, reducido a operar con un centenar de hombres en el extremo oriente venezolano a más de 700 km de donde estaba el ejército patriota. En Achaguas no hubo ningún combate.
*La invasión a la Nueva Granada comienza prácticamente en Mantecal el (27. 05. 1819) y concluye 75 días después con la entrada de Bolívar a Bogotá el (10.08.1819) a eso de las cinco de la tarde, no como se escribe el 12 de agosto de 1.819), después de haber recorrido cerca de 1.200 Km. marchando por ardientes llanuras inundadas, vadeado ríos inmensos, y escalado las gélidas montañas del páramo de Pisba en Boyacá, en las más penosas y difíciles condiciones, para caerle por sorpresa y por donde menos se esperaba, en una maniobra que todavía asombra, al cuartel general y batir al centro del mando colonial en el virreinato de la Nueva Granada.
*El artículo confunde la ciudad fortificada de Cartagena con el puerto fluvial de Mompós situado a más de 150 km al sur; pues el virrey Sámano después de la derrota de Boyacá se refugió en Cartagena por más de un año y no en Mompós.
*Bolívar se reúne con Páez en Canalete el (03.12.1.819) y no en Mantecal un mes antes. Al día siguiente se encuentra con Sucre en el río Achaquiro, también muy lejos de Mantecal, en donde el artículo ubica el encuentro.
* Para fines de 1.819, el ejército colonialista de Morillo desplegado en Venezuela, sin contar las tropas que tenía en la Nueva Granada, era de aproximadamente 15.700 soldados. En ningún momento estuvo “reducido a 4.500 hombres”.
* “Habiéndose retirado Morillo a San Fernando de Apure en dirección de San Carlos, Bolívar lo persiguió hasta Calabozo”: Nada de eso es cierto. Después de las Queseras del Medio, como se vio, Morillo a principios de abril 1.819 se retira a Achaguas para continuar hacia Calabozo, de donde pasó a Valencia. Es a mediados del año siguiente que Morillo después de haber estado en Caracas fija su cuartel en San Carlos. Bolívar entretanto no lo persigue porque sencillamente continúa su plan de invadir a la Nueva Granada, mientras Páez se queda en el Apure.
* “Si Bolívar hubiese avanzado con resolución, sus solas tropas europeas habrían bastado para aniquilar a los españoles, pero prefirió prolongar la guerra cinco años más”. Este párrafo condicionante, ajeno a cualquier pensamiento dialéctico y materialista de la historia habituado a analizar procesos complejos de lucha entre clases sociales, descarta para mí, la autoría de Carlos Marx.
Si Adán no se hubiera comido la manzana que le ofreció Eva, estaríamos en el paraíso. ¡Esto es escolástica! Y lo peor es, que un proceso social anteriormente caracterizado como “revolución “que se estaba definiendo por las armas, se pudiera forzar con suposiciones ideales y por la voluntad de una sola persona con medio millar de legionarios extranjeros (que era el número reconocido por el articulista) acompañantes de Bolívar. Esto contradice totalmente lo que el mismo Marx había escrito, enseñado y practicado desde hacía más de una década: ¡La historia es obra de los pueblos en lucha!
La poderosa máquina militar del colonialismo en América, como lo demostró la realidad que Marx conoció ya concluida, necesitó después de la batalla referida en el artículo, un poco más de cinco años y medio para ser derrotada definitivamente: El ejército patriota conducido por Bolívar debió invadir la Nueva Granada, triunfar en Boyacá el (07.08.1.819), liberar Cartagena el (01.10.1.821), volver a Venezuela y triunfar en Carabobo (24.06.1.821), para de nuevo marchar hacia el sur, al corazón del Imperio español. Liberar la provincia de Pasto con la batalla de Bomboná (07.04.1.822), luego a Quito en Pichincha (24.05.1.822) para destruir totalmente el ejército de más de 15.000 soldados que tenía el virrey La Serna acantonado en el Perú, en los helados Andes con las DOS magistrales batallas, la de Junín (06.08. 1.824) y Ayacucho el (09.12. 1.824). ¿Se hubiera podido evitar esto después de las Queseras del Medio como lo imaginó alegremente el articulista?
Pero regresemos al texto en cuestión:
*Quien persuadió a Bolívar de la creación de la Gran República de Colombia, fue Miranda en Londres durante su encuentro en 1.810, con su proyecto de la gran COLOMBEIA y no el doctor Roscio en Angostura 9 años después.
*El (20.01.1.820) Bolívar no estaba en San Fernando sino a muchas leguas a distancia en San Juan de Payara.
*El articulista da a entender que conoció el texto del armisticio firmado como dice su encabezado entre los gobiernos de España y Colombia. No se entiende entonces, por qué se escribe que, “no figura una sola mención a la República de Colombia”.
*En la batalla de Carabobo (24.06.1.821) Páez dirigía la segunda división de más de 1.500 jinetes constituida por el batallón Bravos de Apure y 12 escuadrones de llaneros. No es cierto que estuviera a “la cabeza de una fuerza constituida fundamentalmente por la legión británica”, pues esta, por razones estratégicas nunca sobrepasó los mil infantes y en este combate estuvo comandada por el oficial Tomas Farriar, quien murió en el combate.
*Cartagena no capituló el (21.09.1.821) ante Santander. Los realistas se rindieron diez días después de lo escrito, el (01.10. 1.821) ante el oficial patriota Montilla.
*La batalla por el lago de Maracaibo ganada por Padilla, se libró el (24.06. 1.823) y no en agosto. La rendición definitiva de Puerto Cabello “no fue obra de Padilla en julio de 1.824”, sino de Páez el (10.11.1.823).
*El congreso de Cúcuta no inauguró sesiones en enero de 1.821, sino en agosto de ese año y la constitución no fue promulgada en agosto sino el (03) de octubre del mismo año.
*El congreso de Lima le confirió poderes dictatoriales a Bolívar, no el (10.02.1.823), sino
exactamente un año después.
*La Constitución Boliviana rigió al Perú, no “unas pocas semanas” sino once meses; del (16.08.1.826) al (11.06.1.827).
*Nunca Bolívar acusó a Páez ante nadie más que la historia en sus cartas. La acusación ante el congreso de Colombia la presentó el intendente de Venezuela Juan Escalona en 1.826 instigado por F. de P. Santander en una de esas intrigas leguleyas típicas del llamado hombre de las leyes.
*Bolívar regresó del Perú a la Nueva Granada con una comitiva civil, la que el articulista confunde con 1.800 soldados peruanos.
*Al congreso Anfictiónico de Panamá realizado el (22.06.1.826) no asistieron ningunos delegados “plenipotenciarios” del Brasil, ni de La Plata (Argentina).
*La convención de Ocaña se instaló el (09.04.1.828) y no un mes antes como se dice.
Además “la casa de campo situada a unas millas de la ciudad de Ocaña”, desde donde Bolívar siguió el curso de la fracasada reunión, era nada menos que la hermosa ciudad de Bucaramanga, situada a más de 180 kilómetros.
*A fines de marzo de 1.830, Bolívar no pudo enfrentarse a Páez pues se encontraba en Bogotá con signos evidentes de la enfermedad consuntiva que lo aquejaba. Desde donde salió el (08) de Mayo hacia la costa caribe en su último viaje, magistralmente narrado por García Márquez.
*Finalmente, Bolívar no falleció “repentinamente”. Según los informes publicados, por el “médico” francés Próspero Reverand quien también realizó la necropsia. Bolívar tuvo un deterioro muy grande de sus condiciones físicas y la consunción lo había forzado 17 días antes de su muerte a ser transportado en una silla de manos por no poderse valer por sí mismo. Su agonía descrita en sus cartas, fue larga, penosa y esperada, al extremo que F. de P. Santander que se hallaba en Europa desterrado porque el propio Bolívar en su grandeza le conmutó la pena de muerte por la de destierro, debido a su autoría en “la intentona para asesinarlo en su propio dormitorio en Bogotá y de la cual Bolívar se salvó porque saltó de un balcón en plena noche permaneciendo agazapado bajo un puente” como dice el articulista, pero sin fechar, ocurrió el (25 .09.1.828) después de la convención de Ocaña. Al enterarse F.P. Santander del fallecimiento del Libertador, dejó escrito en su diario este lacónico alivio: “Murió Bolívar”.
Uno de los primeros hispanoamericanos que criticaron este artículo, fue el dirigente comunista colombiano Gilberto Vieira, quien hizo serios reparos al mentado artículo y logró rescatar el estudio de la vida y obra de Simón Bolívar como parte esencial de la lucha del pueblo trabajador latinoamericano contra el colonialismo. Simultáneamente el escritor Venezolano Jerónimo Carrera, quien llegó a confirmar que a pesar de que las fuentes inglesas citadas en la bibliografía son adecuadas, el articulista escoge deliberadamente “La Histoire” escrita con gran resentimiento por el oficial francés Ducoudray-Holstein, espacialmente adversa y deformatoria de la vida de Bolívar.
También se ocupó de este especializado tema, otro historiador colombiano Uribe Celis en los 80's del siglo pasado, quien bajo el impacto que produjeron las dictaduras militares nazis de la seguridad nacional en el llamado cono sur de América, a pesar de señalar con gran propiedad las grandes inconsecuencias factuales e históricas del artículo, le da todo el crédito y más bien trata de: “Desentrañar la intención subyacente de Marx y el sentido que puede tener para nosotros los latinoamericanos de hoy”, explicando con eruditos malabares, cómo Marx al intentar derrumbar el mito liberal de Luis Napoleón, destruye en la interpuesta persona del Libertador, lo que califica muy superficialmente como el “bonapartismo (dictatorial) de Bolívar”, y estirando bastante el argumento, logra cubrir a los déspotas caudillos militares que, apoyados en las bayonetas, dominaron en Latinoamérica durante el siglo XIX y parte del siglo XX. Concluyendo con esta sentencia: “Marx se equivocó en todos los detalles, pero no estuvo, como se ha creído con ligereza, tan distante de la verdad en buena parte del fondo del asunto”.
Para la fecha citada de 1.858, Carlos Marx residía en Londres y su amistad inquebrantable con Engels estaba sellada desde hacía 14 años. Ya había publicado sus más importantes obras históricas y filosóficas, tenía madurada su concepción Crítica de la Economía Política, pues las llamadas “Grundrisse” estaban concluidas y su obra cumbre El Capital iba muy avanzada. Tenía publicado el Manifiesto Comunista para su partido político internacional, en donde entre otras cosas caracterizaba de una manera insuperable el sistema colonial del capitalismo industrial liderado en ese momento por Inglaterra.
La revolución liberal de 1.848 había dejado sus duras enseñanzas a los obreros europeos y Marx había desenmascarado directamente (sin tener necesidad de recurrir a otras personas) y con lujo de detalles el “bonapartismo” de Luis Napoleón; en magistrales obras sociológicas de análisis como el 18 Brumario y la Lucha de Clases en Francia. Había denunciado a las cortes europeas coaligadas en la reaccionaria Santa Alianza y los intentos europeos de crear Imperios retardatarios y caducos en Méjico, Brasil y los Andes. Sus importantes textos analíticos sobre la revolución en España también ya eran conocidos.
Se había referido con clarividencia excepcional al papel del colonialismo Inglés en China y la India y a la utilización por parte del sistema colonial del capitalismo mundial, del trabajo de los negros esclavos en las grandes haciendas y grandes plantaciones del Brasil, el Caribe tanto inglés como español, y sobre todo en el sur de los Estados Unidos, describiendo la singular clase social de “capitalista-esclavista-latifundista” que esta modalidad de explotación engendraba, y las implicaciones que esto tenía en el proceso de expansión del capitalismo industrial del norte, sobre las grandes plantaciones algodoneras del el sur, así como su influencia en el desarrollo de la guerra civil norteamericana.
Conocía de la revuelta de los esclavos en Haití después de la revolución francesa de 1.789 y su estado de sublevación permanente en todo el Caribe contra sus propietarios, y por sobre todo, tenía acostumbrados a sus lectores, camaradas y discípulos, a sólidas y lógicas explicaciones dialécticas sobre la lucha de clases sociales como premisa para cualquier análisis histórico social.
Con un acumulado así, ¿cómo es posible que Marx hubiera escrito un artículo tan deforme, superficial y volátil como este que venimos comentando?
Que hubiera escrito en varias ocasiones sobre “la revolución, los patriotas, la revolución suramericana, los revolucionarios”, etc, sin ninguna contextualización ni histórica ni social; sin decir nada acerca del tipo de revolución que se estaba definiendo en esa guerra, las clases sociales enfrentadas: Si era una revolución patriótica que se definía con la “expulsión definitiva de los españoles”.
O era una revolución social en cuyo fondo estaban los problemas de la utilización por parte del sistema colonial del capitalismo mundial del trabajo de los negros esclavos en los grandes latifundios de plantación venezolana o en las minas de oro de la Nueva Granada, junto con el problema del trabajo forzado o “mitayo” de los indígenas en las minas el Perú y el Potosí.
Tema esencial de un análisis marxista, que solo se toca en todo el texto con la frase superficial de “la promesa de liberar a los esclavos hecha al presidente haitiano Petión”. Desde hacía un siglo era sabido por las obras del alemán von Humboldt, que la parasitaria Corona española sostenía su decadencia y sus arcas con el oro que salía de las montañas suramericanas extraído por esclavos negros y mitayos indígenas, además, de las inmensas ganancias obtenidas por el rígido monopolio comercial sobre los productos agrícolas como el cacao y la caña de azúcar, producidos en las grandes plantaciones del Caribe también trabajadas con abundante mano de obra esclava. Esto sin contar los jugosos ingresos que recibía por el mercadeo de los propios esclavos en sus puertos caribeños.
Además, debido a la amplia propaganda que habían realizado los románticos liberales europeos y que Marx zahería continuamente, para la época en que se escribió el artículo, era de conocimiento público que la libertad de los esclavos era un punto álgido en el proceso de independencia en toda América. Bastaba leerlo en los decretos expedidos por Bolívar o en su defecto en la Constitución Boliviana, que el articulista da a entender había leído en detalle para poder calificarla como un “code Napoleón”.
¿Cómo no referirse a ello, mientras hay una explanada crítica sobre las tendencias dictatoriales del personaje biografiado basándose en esa Constitución?
“Descendía de una de las familias mantuanas, que en la época de la dominación española constituían la nobleza criolla en Venezuela. Con arreglo a las costumbres de los americanos acaudalados de la época, se le envió a Europa a la temprana edad...”. Se lee como única mención a una clase social en todo el texto. Si hay nobleza, se debe concluir que también hay peones. Entonces, las grandes cantidades de soldados y combatientes de ambos lados enfrentados en una guerra y que el mismo articulista comenta ¿De dónde salieron? ¿Eran negros esclavos contra sus propietarios o eran peones contra los nobles criollos?
¿Eran nobles criollos con sus peones contra nobles españoles y sus tropas traídas de España? O ¿eran “americanos acaudalados” contra no acaudalados, es decir, ricos contra pobres los que guerreaban?
¿Es ese el idioma del autor del Manifiesto Comunista? Mi respuesta tajante es: ¡No!
¿Cómo, después de leída la Carta de Jamaica de 1.815, que no queremos calificar porque ella sola lo hace, se reduce a esta parrafada? “Una vez llegado a este punto de refugio (Jamaica), publicó una proclama en que se presenta como víctima de alguna fracción o enemigo secreto y defendía su fuga ante los españoles como si se tratara de una renuncia al mando, efectuada en aras de la paz pública”.
Bolívar siempre y desde sus inicios hasta que fue derrotado por ellos, tuvo que luchar contra lo que llamó las “facciones de los tiranuelos” y pequeños caudillos militares rivales quienes representaban los estrechos intereses locales oligárquicos de los ESCLAVISTAS fueran ellos terratenientes, mineros o grandes comerciantes, dominantes en cada una de las provincias estancos en que el colonialismo había intencionalmente fraccionado la producción económica en sus colonias; hasta lograr imponer su concepción continental y de avanzada social en la conducción política y militar de la lucha anticolonial.
Pero, una vez el colonialismo fue derrotado irreversiblemente en Ayacucho en 1.824 y sin la presencia del enemigo que los unificó temporalmente, recogieron las concesiones que le habían hecho a Bolívar con respecto a la libertad de los esclavos matizándola en las constituciones como “libertada de vientres”, y de la liberación de la tierra y de los campesinos de las rígidas y regresivas trabas eclesiásticas y coloniales, le voltearon la cara para dar marcha atrás al proceso de reformas económicas y sociales, que Bolívar rebasando y sobrepasando a su propia clase social, había iniciado en el alto Perú después de la rendición del virrey español La Serna.
En Colombia, el hacendado sabanero Manuel Del Castillo y su continuador y amigo, el leguleyo F.P. Santander, asociado luego del atentado septembrino con la poderosa familia de hacendados esclavistas payaneses los Mosquera, incluyendo a uno de ellos extrañamente apellidado Obando (quien bajo la protección legal del mismo Santander) organizó el asesinato del más claro exponente del pensamiento y la acción de Bolívar: el gran mariscal Sucre.
En Venezuela, sus compañeros mantuanos Ribas, Mariño, Arismendi, Bermúdez. Un mulato caribeño con pretensiones de ser noble portugués de apellido Piar a quien debió fusilar y el llanero raso Páez, quien luego de convertirse en el más grande latifundista del país llegó a ser su presidente.
En Ecuador, Flores, hijo de un peluquero venezolano venido con él ejército patriota y que a su sombra ascendió como alto oficial hasta emparentarse en matrimonio con las grandes familias de latifundistas de la región, hasta llegar a gobernar a esa nación.
Y en el Perú, los gamonales Torre Tagle, Riva Agüero y el militar guayaquileño José La Mar. Todos ellos siempre lo acusaron de “dictador centralista”, como si una guerra se pudiera dirigir sin mando central. Se declararon antimilitaristas” con el fin de convertir en montoneras armadas y destruir el ejército patriota gran-colombiano conformado al estilo moderno de un armée europeo, que Bolívar había ido construyendo a partir de los 70 hombres en Calamar (Barrancas) en el bajo Magdalena, en diciembre de 1.812, llevándolo victorioso, después de 16 años de intenso y continuo batallar, hasta la puna peruana de Junín y Ayacucho, con técnicas de combate que envidiaría cualquier mariscal noratlántico.
Los Decretos documentados y expedidos por Bolívar, después de la expedición de Haití en Carúpano en 1.816, en Angostura en 1.819, en Quito después de Pichincha en 1822, en Trujillo en 1.824 meses antes de Junín, y en Alto Perú después de Ayacucho en 1.826, cuando se estaba creando la actual Bolivia; en los cuales se otorgaba la libertad TOTAL a los esclavos, se devolvía la tierra a las comunidades indígenas, se liberaba, la tenencia de la tierra junto con los campesinos, de las regresivas y rígidas trabas eclesiásticas y coloniales y se estimulaba la producción, y se crearon varias universidades públicas; no podían seguir siendo sostenidos por mucho tiempo más y debían ser desmontados y echados para atrás.
Los acontecimientos desde septiembre de 1.826, cuando Bolívar abandona Lima rumbo a Colombia, hasta su triste muerte en Sampedro alejandrino cuatro años después (17 diciembre de 1830) sólo muestra las traiciones, conspiraciones y conjuras asesinas de que se valieron sus antiguos compañeros de armas para desmontar y descuartizar su proyecto de ordenamiento post colonial de la gran república de Colombia y de la confederación continental hispanoamericana, en “patriecitas” oligárquicas de apariencia liberal.
Para cuando se escribió el artículo atribuido a Marx, hacía casi tres décadas el proyecto anfictiónico bolivariano había sido liquidado con el visto bueno del gobierno norteamericano en expansión, las constituciones de Bolivia y de la gran república de Colombia no existían, y estos “tiranuelos facciosos” imponían sus mezquinos intereses en sus parroquias. Lo que ni siquiera merece mención en el artículo, en un momento histórico muy comentado y analizado en Europa, porque en el mundo entero estaban surgiendo naciones como champiñones en el bosque.
Para terminar, debo reconocer que lo ÚNICO serio que se escribe en el artículo, cuya autoría real desconozco; es la extensa cita retratando de cuerpo entero a Bolívar, que se hace a su final como si fuera una extensa conclusión, realizada por el militar de fortuna Ducoudray-Holstein quien sí conoció al biografiado, cuando lo expulsó del ejercito Patriota porque no le permitió depredar y lucrarse aprovechando su posición de mando y debió regresar a su país, Francia, a escribir la famosa diatriba y que en el último renglón dice así:
“Oculta magistralmente sus defectos bajo la urbanidad de un hombre educado en el beau monde (bello mundo) y posee un talento casi asiático para conocer a los hombres”.
Lo que lleva a recordar las recomendaciones que hacía Maquiavelo tres siglos antes a los Príncipes.
Y es que, siguiendo al florentino Maquiavelo, fundador de la ciencia política, se puede concluir que, Bolívar fue un verdadero “Profeta Armado” que, basado en un ejército moderno propio, predicó y realizó su objetivo patriótico de liberar a su gran Patria (la otra América) del sojuzgamiento colonial, para unirla en una gran “republica”, sin hacer concesiones a las propuestas monárquicas que algunos rústicos claudicantes como Páez le hicieron. Un “Príncipe moderno” y revolucionario, verdadero reformador social que unas veces actuó como “zorro” para evitar trampas y otras como “león” imponiendo respeto. Que sorteó tres intentos serios de asesinarlo y sobrevivió a múltiples batallas campales. Y cuya motivación íntima invariable fue la búsqueda de del poder y la gloria COLECTIVAS dentro del objetivo histórico de su clase social, de derrotar al colonialismo en América y crear una patria, combinando exitosamente las dos mitades que según Maquiavelo rigen toda acción humana trascendente: “Virtud y Fortuna”.
Tomado del Libro Simón Bolívar conductor político y militar de la guerra anticolonial en https://freytter.eus/files/pdf/Simon-Bolivar.-Conductor-politico-Alberto-Pinzon-SanchezPDF.pdf
Fuente Imagen Internet.



BLOG DEL AUTOR: *Alberto Pinzón Sánchez
Siguenos en X …@PBolivariana
https://t.me/bolivarianapress
https://www.threads.com/@pbolivariana