La salsa de tomate está elaborada principalmente con la pulpa de este ingrediente y la mayoría de las veces, las personas la cobinan con pasta.
Dependiendo del país en la que sea elaborada, hay unos ingredientes
que se le añaden: En México le colocan chiles rojos, cilantro, vinagre y
limón; en España o Italia, frituras de cebolla, albahaca y varias especias y en Venezuela, pimienta.
También existe una versión llamada salsa a base de tomate,
la cual se expende al igual que la salsa procesada de frasco y las
personas la pueden encontrar a menor precio, sin embargo, su calidad es
muy inferior a la que se realiza de manera casera y con el tomate
completo.
Para 5 porciones
Ingredientes
3k de tomates maduros
2 cebollas grandes (de sabor fuerte)
4 dientes de ajo
Albahaca
Aceite de oliva virgen
Agua
Preparación
Picar
la cebolla y los ajos en trozos muy pequeños. En una olla grande
sofreír la cebolla y cuando empiece a tener un color transparente,
añadir el ajo y la albahaca. Cuando doren estos ingredientes, colocar
los tomates y poner a fuego medio.
Echar
los tomates a medida que se ablanden con una cuchara de palo y remover
de vez en cuando, añadir medio vaso de agua cuando sea necesario.
A media cocción de los tomates, colocar más de albahaca y mantener la olla tapada lo más posible.
Cuando los tomates estén deshechos del todo y la salsa haya tomado un bonito tono anaranjado estará lista.