EEUU centra todos
sus esfuerzos para prepararse para el apocalipsis económico de
septiembre mientras que las previsiones son todavía más aterradoras,
afirma el columnista de RT Robert Bridge.
Y no es una sorpresa —indica Bridge–
ya que los analistas parecen competir en hacer el pronóstico más
escalofriante que recuerdan ya los cuentos que comparten los niños
delante de una hoguera en un campamento.
Parece que los economistas profesionales
participan en el concurso ‘Inventa la metáfora más aterradora” al
describir el futuro de la economía global.
El fundador del instituto Trends
Research Institute, que predijo el “pánico de 2008”, opina que en un
futuro próximo seremos testigos de la caída del mercado global de
valores y pronostica “un terremoto económico (que) repercutirá en todo
el mundo”.
“Se desencadenará pánico en las calles de Wall Street a Shanghái, del Reino Unido a Brasil”, manifestó Gerald Celente en una entrevista a la agencia King World News añadiendo que los mercados se colapsarán con un efecto dominó.
Por su parte, el analista Larry Edelson pronosticó incluso la fecha exacta de la catástrofe o, como califica este día, de “la montaña rusa a través del infierno”, reporta sputnik.
“El 7 de octubre de 2015, el
primer superciclo económico desde 1929 desencadenará una crisis
financiera global de dimensiones épicas”, indicó precisando que la
catástrofe “pondrá de rodillas a Europa, Japón y EEUU y enviará a casi
1.000 millones de personas a una montaña rusa a través del infierno
durante los próximos cinco años”.
A juicio del experto, será un “viaje que no ha visto ninguna generación”.
La mayoría de los expertos coinciden en
que los optimistas datos de las ganancias récord de Wall Street y la
subida del dólar solamente esconden grietas fundamentales, ya que el
colapso histórico se iniciará en EEUU dentro de varios meses.
No es extraño que estas previsiones de
los economistas hagan a EEUU y al mundo tiritar sintiendo miedo y
desamparo como si realmente se aproximara el apocalipsis.
Incluso si las preocupaciones de los
expertos resultan infundadas, los preparativos no resultarán de más en
caso de una crisis en EEUU, resume el columnista de RT.