7 de octubre de 2015
Cuatro
buques de guerra rusos lanzaron hoy 26 misiles crucero contra 11
objetivos del Estado Islámico (EI) en Siria desde las aguas del mar
Caspio, a 1.500 kilómetros de sus objetivos, informó hoy el ministro de
Defensa ruso, Serguéi Shoigu.
"Según
datos de control, todos los objetivos fueron destruidos y no hubo
víctimas entre la población civil. Los resultados del ataque demostraron
la alta eficacia de los misiles a grandes distancias, de casi 1.500
kilómetros", dijo Shoigu en una reunión con el presidente ruso, Vladímir
Putin, retransmitida por la televisión estatal rusa.
El jefe del
Kremlin destacó que "el hecho de que todos los blancos hayan sido
alcanzados refleja el buen estado de la industria de la defensa y la
alta preparación del personal" militar ruso.
Se trata de
la primera vez en que Moscú informa del empleo de misiles crucero en su
operación militar contra los yihadistas en Siria, de la que hoy se
cumple una semana.
Hasta
ahora, todos los ataques contra objetivos de las distintas
organizaciones terroristas que figuran entre los objetivos rusos fueron
ejecutados con bombarderos y aviones de asalto.
Por otro
lado, Putin aseguró que Moscú estaría dispuesta a unir sus fuerzas con
la oposición moderada siria que lucha contra los terroristas, en
concreto con el Ejército Libre Sirio.
"Si se
trata del ala militar de la oposición moderada, unir los esfuerzos en la
lucha contra organizaciones terroristas como el Estado Islámico o el Al
Nusra sería un buena base para el posterior arreglo político en Siria",
dijo Putin, quién subrayó que Moscú ni siquiera sabe dónde están sus
posiciones ni quién los dirige.
Además,
Shoigu informó al presidente de que el Ministerio de Defensa ha
establecido ya el contacto directo con el mando militar turco "para
impedir violaciones del espacio aéreo" en la zona de frontera
turco-siria.
Tanto la
Alianza Atlántica (OTAN), a la que pertenece Turquía, como el propio
Gobierno turco han informado de que los pasados días 3 y 4 de octubre
aviones militares rusos entraron brevemente en el espacio aéreo turco.
Moscú ha reconocido uno de los incidentes, el del sábado, y lo achacó a las malas condiciones meteorológicas.
El
presidente turco, Recep Tayip Erdogan, ha advertido de que estos
incidentes pueden poner fin a las "buenas relaciones" entre los dos
países.