EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El expresidente del Parlamento Centroamericano (PARLACEN), Manolo Pichardo, reaccionó indignado ante las declaraciones ofrecidas por el embajador estadounidense en la República Dominicana, James Brewster, en las que manifestó que tiene derecho a opinar sobre los asuntos dominicanos por la cercanía de ambos países y las inversiones del suyo en estas tierras.
Pichardo, dijo que nunca había escuchado expresiones “tan poco diplomáticas” en la historia reciente de la República Dominicana, y coincidió con personalidades y sectores de la sociedad que critican las constantes injerencias del embajador en los asuntos que tienen que ver con las políticas domésticas.
“El embajador estadounidense, James W. Brewster, actúa en el país más que como un diplomático como gobernador de la isla, como un procónsul, que no solo opina sobre los asuntos que conciernen al país, sino que traza pautas y se comenta que visita a funcionarios con la intención de darles instrucciones”, opinó el también vicepresidente de la Conferencia Permanente de Partido Políticos de América Latina y El Caribe, COPPPAL.
Manifestó que su velada amenaza de retiro de visas estadounidenses contenida en la sutil sugerencia de que el que no esté de acuerdo con él que vaya a la embajada y la entregue, es un acto de arrogancia que se repite con frecuencia en funcionarios de los Estados Unidos, lo que, según un estudio realizado en América Latina, es la causante de la desconfianza y el desprecio que sienten muchos latinoamericanos por ellos.