Resumen Latinoamericano / 3 de junio de 2018 / RT y Radio Cooperativa
El Presidente Sebastián Piñera (ultraderecha) aseguró que la “acción internacional” es indispensable para recuperar la “democracia” y el “respeto” a los derechos humanos en Venezuela, mediante una carta enviada al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.
El Mandatario comienza la misiva comentando que “con enorme interés y preocupación he leído el Informe de la Secretaría General de la OEA y del Panel de Expertos Internacionales Independientes, que establece la posible comisión de crímenes de lesa humanidad en Venezuela, publicado el pasado 29 de mayo”.
Resalta que dicha investigación de la OEA “demuestra su compromiso y esfuerzo por denunciar crímenes de lesa humanidad, la catástrofe humanitaria que atraviesa el pueblo venezolano y las reprochables acciones de la administración del Presidente Nicolás Maduro”.
En ese sentido, sostuvo que “la acción internacional para reclamar la recuperación de la democracia y el respeto a los derechos humanos en Venezuela, no sólo es necesaria, sino que indispensable”.
Instó además a que los antecedentes expuestos en el informe del organismo sean enviadas a la Fiscalía de la Corte Penal Internacional, siguiendo los conductos establecidos en el Estatuto de Roma, que en 1998 significó la constitución de dicha corte, y emplazó a Venezuela a cooperar con la instancia.
Nota del ed. El ultraderechista Sebastián Piñera, que obtuvo poco más del 25 % de los votos de las personas habilitadas para sufragar en las últimas elecciones presidenciales, es parte de los eslabones que hacen los gobiernos de México, Colombia, Perú y Argentina en la región, que representan directamente los intereses del Departamento de Estado de EEUU. Si bien Chile depende comercialmente de China en primer orden, el dólar estadounidense determina las políticas monetaristas del Estado capitalista del país andino, considerando su economía primario exportadora (todo lo que se exporta e importa se hace en dólares estadounidenses). Asimismo, Chile es uno de los países más desiguales del planeta, y como miembro de la OCDE, es el que cuenta con el sistema tributario más regresivo de esa organización internacional. En otras palabras, no sólo es la nación cuyos impuestos al gran capital son los más bajos, sino que además, las y los asalariados son los peor remunerados. Finalmente, en Chile no existe ningún tipo de consultas a la población para fijar políticas locales e internacionales. Esto es, no existe democracia. AFC
