Resumen Latinoamericano*, 20 de junio 2018.
A través de un comunicado en su página web, la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad (REDH) hace un llamado al debate público en torno a la despenalización del aborto, en particular por ser “un asunto de Salud Pública y sin desconocer los factores socioeconómicos involucrados”. El comunicado brinda apoyo al derecho de palabra de movimientos feministas venezolanos ante la Comisión de la Mujer y Género de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), que se realiza este miércoles 20 de junio para plantear sus posiciones con respecto al aborto.
La actividad forma parte de una agenda de trabajo que vienen llevando a cabo diversas agrupaciones dedicadas al tema de género en comunidades e instituciones en la cual se ha profundizado la discusión sobre la maternidad voluntaria, y en general sobre los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, de cara a la redacción de una nueva carta magna, y posteriormente una ley que ahonde, dé sustento y reglamentación.
El comunicado de la REDH señala:
Desde la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad (REDH) nos sumamos a las voces que hacen un llamado al debate público respecto a la necesidad ineludible de legislar sobre el aborto bajo una óptica de género, entendiendo que ante todo es un asunto de Salud Pública y sin desconocer los factores socioeconómicos involucrados.Este miércoles 20 de junio, distintas organizaciones sociales que abogan por la legalización del aborto en Venezuela, tendrán un histórico derecho de palabra en la Asamblea Nacional Constituyente para elevar esta importante propuesta.Para nosotros y nosotras, este debe ser el comienzo de un debate nacional serio y argumentado, libre de prejuicios y tabúes oscurantistas que criminalizan una innegable realidad en la que, según cifras de la Organización Mundial de la Salud, anualmente en el mundo se realizan 55 millones de abortos, de los cuales 25 millones son practicados en condiciones peligrosas, y de estos, 8 millones ocurren en condiciones francas de insalubridad y alto riesgo para la vida de las mujeres. En América Latina 3 de cada 4 abortos se realizan en condiciones inseguras.La propia OMS declara que las leyes y políticas restrictivas del aborto no reducen su número pero sí eleva la cantidad de procedimientos en condiciones de riesgo impactando negativamente en los índices de mortalidad materna.Por tanto nuestro llamado es al debate nacional para el cual proponemos manejar 3 líneas argumentativas:
- Razones de Salud Pública
- Impacto en la igualdad de género y emancipación de la mujer
- Fenómenos socioeconómicos relacionados a la interrupción voluntaria del embarazo.
No abordar seriamente esta realidad es parte del problema.
Aunque en Venezuela el aborto es ilegal, ocurre con frecuencia y, en el caso de jóvenes de escasos recursos, se suele recurrir a personas no preparadas o a métodos que ponen en peligro la vida de la mujer. Según datos publicados por el diario La Razón, durante el año 2014 se atendieron 2.336 complicaciones por abortos en la Maternidad Concepción Palacios de Caracas.
Tal como lo resumen las consignas que acompañan a las movilizaciones feministas que se encontrarán este miércoles en la ANC, las tres propuestas principales son:
- Educación sexual desde la infancia
- Acceso gratuito a anticonceptivos
- Aborto legal, seguro y gratuito
Explicó Daniela Inojosa, representante del colectivo Tinta Violeta, que participan en esta convocatoria mujeres y hombres de las agrupaciones que hacen parte de la Red La Araña Feminista, así como la Red de Información por un Aborto Seguro (RIAS), el Frente Cultural de Izquierda y La Otra Escuela.
Es importante destacar que los movimientos feministas no presentan el aborto como un método anticonceptivo, sino como un último recurso que busca que aquellas mujeres que consideren abortar por no tener otra salida o por haber vivido circunstancias terribles, puedan hacerlo de forma segura y sin arriesgar sus propias vidas, como ocurre actualmente.
Deuda histórica
La militante feminista planteó que Venezuela y Paraguay son los dos países de la región que menos han avanzado legislativamente para amparar a las mujeres que no desean continuar con un embarazo.
“En Venezuela el Código Penal establece una pena de seis meses a dos años de cárcel para aquella mujer que se practique un aborto. Sólo deja de ser un delito si la vida de la madre está en peligro por continuar con el embarazo, por eso es que somos una de las legislaciones más restrictivas de Suramérica, donde está despenalizado en las tres causales en casi todos los países menos Venezuela y Paraguay”.
Las otras dos causales a las que se refiere Inojosa, que son admitidas en toda América del Sur, son en beneficio de la salud mental y física de la mujer, más allá del peligro de muerte, que es la única contemplada en la normativa jurídica venezolana.
Un cuarto causal, que es la violación, también se toma en cuenta en Brasil, Bolivia y Argentina. En Chile y Colombia se admite la interrupción del embrazo por inviabilidad fetal, además de las tres situaciones ya citadas. En Uruguay, Guyana y Guayana Francesa el aborto es legal bajo cualquier circunstancia.
El momento para debatir
A pesar de ese desfase legislativo, la vocera considera que en Venezuela, en este momento, se ha dado una importante apertura a este tema, históricamente considerado un tabú, especialmente en lo que respecta a las instituciones y a la formulación de políticas públicas. A partir de esa oportunidad, dada especialmente por la instalación de la ANC, las agrupaciones feministas decidieron reavivar la llama de un clamor histórico y comenzar de nuevo a posicionar el debate en el país.
“A partir de la convocatoria que hiciera el Presidente Maduro a la conformación de la ANC, hicimos junto con otros movimientos feministas y de la sexo-género-diversidad una serie de encuentro que llamamos Aquelarre Feminista. A partir de allí articulamos propuestas que van desde la creación de un sistema de cuidado para la vida que descargue esa responsabilidad de las mujeres hasta una serie de artículos sobre los derechos sexuales y reproductivos”, explicó.
“Creemos que hay una gran apertura a debatir todos los temas. Hemos sentido de parte de algunas y algunos constituyentistas que entienden porqué estamos pidiendo la legalización del aborto, que no es un tema de si el aborto sí o el aborto no, sino que es un tema de salud pública; que las mujeres abortan y las estamos dejando solas en la clandestinidad. Cuando si lo legalizamos podemos generar un políticas públicas que le den contención económica, sicológica y social a aquellas que ya tomaron la decisión”, subrayó Inojosa.
Aborto vs legalización
Para la activista, visibilizar el tema del aborto en la legislación venezolana y asumirlo como una política pública es una tarea impostergable, más allá de dogmas religiosos y más allá de la posición personal de cada persona ante la posibilidad de un embarazo no deseado. En ese sentido, Inojosa deja claro que estar de acuerdo con la despenalización del aborto no es lo mismo que estar de acuerdo con abortar.
“En la Revolución se debe legislar para todas y para todos, y crear las condiciones más dignas de vida para las venezolanas y los venezolanos. Nosotras no creemos que el debate sea si el aborto es bueno o es malo, ninguna mujer quiere abortar, pero hay una realidad, unas condiciones que la llevan a tomar esa decisión, y el Estado debe acompañarla, debe asumir su responsabilidad con estas mujeres que ponen su vida en riesgo y ayudarlas”, recalcó.
Por eso asume como tarea de vital importancia la aprobación de una ley sobre educación sexual, reproductiva y para el placer, que incluya la necesidad de educar en estos tópicos desde la educación inicial, el acceso gratuito y continuo a anticonceptivos, “el derecho a ejercer nuestra sexualidad plenamente y con respeto, y sobre todo el derecho a la maternidad voluntaria”.
El derecho de palabra ante la Comisión de Mujer y Género de la ANC tendrá lugar a las 9:00 de la mañana en la sede del poder plenipotenciaro ubicado en la esquina La Francia. La invitación es abierta a todas y todos quienes tengan interés en el tema y deseen plasmar su propuesta.
Texto: AVN, REDH y Alba Ciudad
