Resumen Latinoamericano*, 3 septiembre 2019.
El ministro del Poder Popular para Relaciones Interiores Justicia y Paz, Néstor Reverol, informó que fue desmantelada una organización delictiva dedicada a realizar el desvío de combustible venezolano desde la planta termoeléctrica Táchira, ubicada en la Fría del estado homónimo hacia Colombia.
En declaración a los medios de comunicación, Reverol detalló que por el caso han sido detenidos 17 funcionarios, de los cuales cinco son de Corpoelec, diez de Petróleo de Venezuela (Pdvsa) y dos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), a quienes se les acusa de delitos de contrabando agravado de hidrocarburo, corrupción propia y asociación para delinquir.
El ministro Reverol narró que los gerentes de la termoeléctrica Táchira hacían la solicitud desde la oficina de venta de Pdvsa en San Cristóbal de las cisternas con combustibles, entre 10 y hasta 18 diarias (superior a la cantidad requerida).
Añadió que las gandolas eran desviadas y le quitaban los precintos de seguridad, y en complicidad con algunos trabajadores y la GNB desviaban el combustible hacia lo que llaman los patios, que eran lugares clandestinos donde pasaban el hidrocarburo a los tanques y pimpinas.
“Las mafias colombianas han obtenido ingresos superiores a 20 millones de dólares mensuales de este desvío flagrante de combustible”, dijo Reverol.
Informó que también desde El Vigías, en Mérida, enviaban el agua hidrocarburada, que es agua que contiene combustible diesel, aceite, y agua hacia la planta termoeléctrica en Táchira para separar el aceite, el agua y dejar el gasoil puro.
Precisó que se hacía el proceso de separación, pero a los tanques le colocaban mangueras para sacar el gasoil ya puro para llevarlo a Colombia.
*vtv
