Resumen Latinoamericano, 15 octubre 2019
El fuerte dispositivo policial represivo desplegado conjuntamente entre Mossos d’Esquadra y Policía Nacional ante la sede de la Delegación del Gobierno en Catalunya generó violentas cargas que se han registrado este martes por la noche tras la concentración en protesta por la sentencia a los líderes independentistas. Convocadas por ANC y Òmnium, miles de manifestantes se han concentrado por la tarde frente a las vallas que blindan el edificio en las calles cercanas.


Los enfrentamientos han comenzado cuando la policía local (Mossos de Esquadra) y la policía española cargaron violentamente contra la gente concentrada pacíficamente en la zona. Además, al menos tres manifestantes han sido detenidos por «atentado a la autoridad».
Pasadas las nueve de la noche, algunos manifestantes han apilado cartones frente a la línea policial y los han prendido, provocando una gran columna de fuego y humo. La tensión ha seguido subiendo y se han registrado nuevas cargas entre los manifestantes y la policía, que ha realizado disparos de proyectiles de foam para tratar de dispersar a la multitud.

A medida que avanzaba la noche, los enfrentamientos se han ido endureciendo, dejando una imagen insólita de un paseo de Gràcia lleno de pequeñas hogueras y de grupos violentos policiales que realizaban cargas constantes contra los jóvenes que resistían tras el fuego.

Los Mossos d’Esquadra (verdaderos cipayos al servicio no de Catalunya si no de «España» han avisado a través de las redes sociales de que se estaban registrando “graves incidentes” en el Eixample derecho de Barcelona y recomendaba a la población no acercarse a las inmediaciones de las calles Mallorca y València con Pau Claris. Si en paseo de Gràcia, las imágenes eran de batalla campal, en Pau Claris la situación no era diferente, donde los bomberos han tenido que intervenir para apagar una gran hoguera en mitad de la calle.




También en Tarragona, Girona y Lleida se han producido escenas de tensión en las movilizaciones ante las delegaciones del Gobierno. En Lleida, más de 6.000 personas han llevado a cabo una sentada ante la subdelegación del Gobierno. Posteriormente, un grupo de manifestantes ha tirado varios objetos a la línea policial que protegía el edificio, como piedras, botellas de vidrio o latas.
La tensión ha ido en aumento, con barricadas y contenedores incendiados y los agentes han tratado de dispersar a la gente disparando proyectiles de foam. Varias personas han resultado heridas y han tenido que ser atendidas por los servicios de emergencias.

En Girona, se ha vivido una batalla campal ante la Subdelegación de Girona entre manifestantes y antidisturbios de los Mossos y la Policía Nacional. Cuando se ha terminado el acto de encendido de velas, algunos de los concentrados han empezado a tirar contra el cordón policial que protegía el edificio. Entre otros, reprochaban a los agentes que los hubieran echado del corte de la AP-7 que se ha hecho este martes.

Los concentrados han tirado vallas en el suelo, han volcado contenedores a modo de barricadas y lanzaron todo tipo de objetos contra los agentes, que han respondido haciendo cargas, porrazos y disparos de advertencia. Mossos y Policía Nacional han dispersado a los manifestantes por las calles adyacentes, Jaume I y la zona de Correos.

En Tarragona, los Mossos d’Esquadra han cargado esta noche contra un grupo de manifestantes encapuchados frente a la Subdelegación del Gobierno en Tarragona. La policía ha disparado proyectiles de foam después que los manifestantes arrojaran pintura y otros objetos contra el edificio, protegido por un cordón policial.












8/12
Los manifestantes que se han enfrentado a la policía participaban en la concentración convocada por el independentismo ante las sedes de la Delegación y Subdelegaciones del Gobierno en Cataluña y, en el caso de Tarragona, ha reunido a unas quinientas personas. Los concentrados han permanecido durante un rato ante la sede de la Subdelegación del Gobierno, en la plaza Imperial Tarraco, hasta que un grupo ha comenzado a lanzar objetos y se han producido las cargas de los antidisturbios.
















