Publicado por: Jose Sant Roz
¡Lula empavado por Edmundo!, éste le mandó una carta y en enterándose de ella, se fue de bruces en su cocina…
José Sant Roz
- A don Luiz Inácio Lula da Silva le encanta la cocina, y preparaba unas pizas muy especiales en su casa de campo. Era un fin de semana que le prometía un buen relajo, un excelente esparcimiento al lado de su esposa, y se sentía animado, eligiendo los aderezos, libando vino francés, danzando como un derviche y hasta permitiéndose hacer de Pavaroti con ¡Oh sole mío! entre trago y trago. Así se encontraba, cuando va y pregunta a su Secretario Ejecutivo si tiene algo importante y nuevo que informarle, y escucha: “Sí, señor Presidente, hay un mensaje enviado desde Madrid por el señor Edmundo González Urrutia, el recién electo Presidente de Venezuela, ¿se lo puedo pasar?”. ¡Noooooooooo!- dicen que respondió Lula, y se fue de bruces, con bandejas y ollas, llevándose un serio trancazo en la región occipital, de modo que hubo de ser trasladado de urgencia al Hospital Sirio-Libanés de la ciudad de Brasilia.
- El dicho, “QUIEN SE METE CON VENEZUELA SE SECA”, parece que se hace cada vez más evidente, y así se han ido empavando muchos presidentes, por ejemplo, todos aquellos que conformaban el parapeto del Grupo de Lima. Resulta que don Edmundo se puso a redactar una carta a Lula, que ha estado leyendo en varios foros en España, en Madrid y Barcelona,
- Se dice que Lula exclamó, a punto casi de irse al infierno: “Quem diabos disse àquele homem que ele é presidente?” En la carta de don Edmundo, éste le decía: “Señor Excelentísimo Presidente de Brasil, don Luiz Inácio Lula da Silva… le ruego encarecidamente que usted mantenga la presión, porque está absoluta y totalmente comprobado por todos los expertos de la Unión Europea que yo gané las elecciones del 28 de julio pasado. Tengo aquí en mis manos las únicas actas verdaderas que existen y que ya han sido publicadas, las mismas que el Centro Carter llevó a la OEA. Amigo y admirado Presidente don Luiz Inácio Lula da Silva, no deje de comunicarse con Petro e insista también con la presidente de México la señora Claudia Sheinbaum Pardo, porque ella es una gran política, científica y académica….
- Los más terrible que llegó a recordar Lula de su Secretario Ejecutivo, poco antes de perder el conocimiento, fue que ya en el diario O Globo, había aparecido una entrevista a don Edmundo en el que éste decía: “El señor Lula debe mantener la presión contra el dictador Maduro, como la que comenzó al principio de esta lucha. Y que en los BRICS debe mantenerse severo en contra de Venezuela: solicitar que no se le admita como miembro en tan importante organización mundial. Que, por favor, el tirano llegue a sentir que no puede aguantar más, hasta que admita que está derrotado”, afirmó al periódico brasileño durante una entrevista en Madrid, la ciudad donde vive desde que abandonó su país.
- La nota de prensa seguía diciendo: “Además, González aseguró que los esfuerzos de mediación de los Gobiernos de Brasil y Colombia que iniciaron tras las elecciones de julio deben continuar con más fuerza, pese a la falta de avances y que se trata de procesos que no tienen fecha de inicio y término.
- En la carta el posible sucesor de don Juan Guaidó seguía diciendo: “La mediación puede tener altos y bajos y esperamos que pueda llegar a un punto positivo; el foco central es convencer al dictador Maduro de que debe respetar la voluntad popular…”.
- En el hospital Hospital Sirio-Libanés, una vez recuperada la conciencia el presidente Lula le ha dicho su Secretario Ejecutivo que la insistencia del señor González también se presenta a través de recados enviados por los partidos VOX y PP de España, exigiéndole que no proponga eso de repetir las elecciones, algo que los tiene muy preocupados: “Yo -dice don Edmundo – rechazo tajantemente la repetición de las elecciones, una de las propuestas lanzadas por mi amigo Lula, al considerar que los votos y las actas electorales están allí para que cualquier persona que quiera pueda verlas”. Lula, apenas balbuceando, muy adolorido por el golpe, y horriblemente fastidiado por lo que tenía que estar escuchando, decía: ¿Pero dónde, dónde, dónde están esas actas que dice el señor Edmundo que tiene, DIABOS DISSE ÀQUELE HOMEM QUE ELE É PRESIDENTE?
