Los beneficios para el corazón del chocolate negro
In Salud on 07/11/2012 at 20:07Ayuda a bajar la presión arterial en personas hipertensas. Reducir los niveles de colesterol, de LDL (el colesterol ‘malo’) y de resistencia a la insulina, retrasando la aparición de diabetes, obesidad e hipertensión
El chocolate negro ayuda a bajar la presión arterial en personas
hipertensas. Pero si se adopta esta medida hay que limitar las calorías
que se ingieren con otros alimentos.
Hace unos años, el radiólogo Norman Hollenberg decidió investigar un fenómeno curioso.
Los indios Kuna, que vivían en el archipiélago de San Blas (Panamá), no sufrían hipertensión.
Y eso que su dieta era muy rica en sal. Sin embargo, cuando los
integrantes de esta etnia se mudaban a la capital panameña, incluso sin
modificar su consumo de sal ni engordar, la hipertensión empezaba a ser
más común.
Tras investigar numerosos factores, Hollenber y su equipo llegaron a la
conclusión de que el cacao (un alimento rico en flavonoides, un tipo de
antioxidantes) era el responsable de esta tensión arterial saludable.
A Claudio Ferri, del Centro de Hipertensión Arterial y Prevención
Cardiovascular de la Universidad de L’Aquila (Italia), le interesaron
los estudios de Hollenber, así que decidió indagar en las propiedades
antihipertensivas del chocolate.
Para ello, él y su equipo han estudiado a una veintena de personas
hipertensas que tomaron durante 15 días 100 gr de chocolate negro
(equivalente a una chocolatina). Ninguno estaba tomando
antihipertensivos, ni fumaba ni padecía diabetes u otra enfermedad.
Tras seguir esta ‘dieta’ los pacientes lograban disminuir su tensión arterial sistólica (la cifra máxima) en 12 mm/Hg, mientras que la presión diastólica (la baja) disminuía una media de 8,5 mm/Hg.
Asimismo, la golosina conseguía reducir los niveles de colesterol, de
LDL (el colesterol ‘malo’) y de resistencia a la insulina, es decir, que
“la insulina funciona de un modo más adecuado, retrasando la aparición
de diabetes, obesidad e hipertensión”, aclara Ferri, que publica sus
conclusiones en el último número de la revista ‘Hypertension’.
“Este no sólo es un efecto estadísticamente significativo sino
importante desde un punto de vista práctico. Es la clase de reducción en
la tensión sanguínea que a menudo se encuentra con otras intervenciones
dietéticas”, comenta Jeffrey Blumberg, otro de los investigadores y
experto en nutrición de la Universidad Tufts (EEUU).
Recomendaciones
A modo de comparación, los pacientes tomaron durante otro periodo de
tiempo semejante una chocolatina de chocolate blanco. “El chocolate
blanco, que no tiene flavoniodes, era el perfecto alimento control,
porque contiene todos los otros ingredientes y calorías del chocolate
negro”, aclara Blumberg. Sin embargo, la ingesta de estos dulces no
modificaba los valores tensionales de los participantes. También se
registraron resultados similares en voluntarios sanos.
“Debería animarse a la gente a comer de un modo más sano, es decir, empleando comidas naturales, para reducir sus factores de riesgo cardiovascular. El cacao (el chocolate negro), si se adopta de un modo correcto sin aumentar el peso corporal, podría ser uno de estos alimentos“, explica Ferri a ‘elmundo.es’.
De todos modos, este especialista matiza mucho sus conclusiones que “en
absoluto” significan que todo hipertenso tenga que tomarse diariamente
un chocolate: “Si te planteas comer chocolate negro diariamente
-junto con verduras, vino tinto y té [también ricos en flavonoides]-,
debes disminuir las calorías de otros alimentos para evitar el
verdadero peligro del siglo XXI: el sobrepeso y la obesidad. También el
ejercicio diario moderado es altamente recomendable”, precisa.
De hecho, este especialista está convencido de que “los cambios en el
estilo de vida deben ir de la mano de los fármacos, especialmente para
prevenir y tratar la hipertensión y la diabetes”.
Ponga un dulce en su vida
“Curiosamente, los consumidores de chocolate y otros dulces parecen
tener una tasa de mortalidad más baja en comparación con los que no
comen golosinas”, comentan los autores italianos en sus conclusiones.
Pese a su mala prens, los dulces no pueden ser del todo malos. Esto es
lo que se plantearon hace siete años tres expertos en salud pública de
la Universidad de Harvard (EEUU): “Dado que los dulces han existido
durante siglos, suponemos que no pueden ser totalmente malos. [Así que]
decidimos investigar si su consumo estaba asociado a la longevidad”,
comentaron entonces en el ‘British Medical Journal’.
Su estudio se basó en los datos de más de 7.800 hombres. Los autores
descubrieron que los consumidores de dulces disfrutaban, como media, de
un año más de vida que los que no tomaban golosinas. De todos modos, no
conviene abusar: las menores tasas de mortalidad no eran entre los más
golosos (al menos tres chucherías semanales), sino entre aquellos que
tomaban dulces entre una y tres veces al mes. “Como con la mayoría de
cosas de la vida, la moderación parece ser la máxima”, concluían los investigadores.
Los flavonoides del chocolate actúan como una pequeña dosis de aspirina
Una dieta sana no se compone únicamente de frutas y verduras. Alimentos
como el cacao también resultan beneficiosos para el organismo. Según un
estudio realizado por la Universidad de California (EEUU), el chocolate
tiene un efecto similar a una baja dosis de aspirina: reduce los
coágulos sanguíneos –causantes de ataques al corazón e ictus– gracias a
los flavonoides que contiene.
«Hemos hallado evidencias de que el consumo de chocolate puede tener
efectos cardiosaludables», apunta Carl Keen, nutricionista de dicha
universidad, que ha presentado sus hallazgos en la conferencia de la
Asociación Británica para el Avance de la Ciencia, que se está
celebrando en Glasgow.
«No sólo observamos un incremento de la capacidad antioxidante tras el
consumo de chocolate, sino una variación de ciertos componentes que
afectan a los vasos sanguíneos».
Efecto cardiosaludable
Keen y sus colegas midieron el efecto del cacao en 25 voluntarios que
habían tomado 25 gramos de chocolate con un alto contenido de
flavonoides y los compararon con otros voluntarios que habían comido
pan.
Entre dos y seis horas después de que ambos grupos hubiesen ingerido los
alimentos, los investigadores tomaron muestras de sangre para medir los
niveles de agregación plaquetaria.
Los voluntarios que habían comido chocolate tenían unos niveles más
bajos de agregación de plaquetas que aquellos que habían ingerido pan,
lo que significa que tenían un riesgo inferior de sufrir un coágulo
sanguíneo.
Reducir los trombos
Keen señala que estos resultados apoyan las conclusiones de
investigaciones anteriores, que ya habían demostrado que el chocolate
actúa como una dosis baja de aspirina, es decir, ayuda a reducir los
trombos sanguíneos.
Sin embargo, el experto ha advertido que comer cacao no puede ser un
sustituto de la aspirina porque su mecanismo de actuación en el
organismo es distinto que el del chocolate.
El nutricionista concluye que los «resultados nos conducen a pensar que
el cacao puede contribuir a una dieta sana y equilibrada», pues una
pequeña tableta de chocolate negro contiene tantos flavonoides como seis
manzanas, algo más de cuatro tazas de té o dos vasos de vino tinto.
7 nuevos estudios científicos, poniéndonos al día!!
Un resumen de los estudios y noticias científicas de esta semana y empiezo con mis favoritos :
Contiene flavonoides con potente actividad antioxidante
y anti-inflamatoria que disminuyen la presión arterial y el flujo de
sangre, además de mejorar los niveles de lípidos en sangre, está
ampliamente demostrada su relación con la salud cardiovascular.
31 afortunados asignados al azar para consumir una porción diaria (50
gramos) de cualquier chocolate con al menos 70% de cacao durante 15 días
resultaron tener menos glucosa, menos LDL y más HDL.
Solo señalar que los afortunados pedían consumir más chocolate, y que se
van a seguir realizando estudios esta vez durante un período de tiempo
mayor. (¿Alguien puede enchufarme para participar?)
- El hígado regula la cantidad de comida que comes,
y lo hace comunicándose directamente con el cerebro con una enzima
llamada “FBPase”, relacionada con la producción de glucosa. Probaron a
aumentarla artificialmente en ratones creyendo que desarrollarían
diabetes y resultó que perdían el apetito. Presumen que las personas muy
obesas pueden tener inactiva esta enzima. Habrá que seguir
investigando.
- Un consumo moderado de alcohol, antes y después de un ataque al corazón, asociado con menor riesgo de mortalidad cardiovascular.
Este estudio que siguió las costumbres de 51.529 hombres desde 1986 a
2006 desvelo que el riesgo de mortalidad fue alrededor del 30% menor
para los bebedores moderados (menos de 30g al día) que para los
abstemios.
- Los ácidos grasos Omega-3 puede ayudar a reducir el daño físico causado por el tabaquismo.
Se trataron a los pacientes fumadores con suplementos y se
encontró mejoría de la función arterial. 2 g / día de ácidos grasos
omega-3 durante cuatro semanas resultaron en mejora la rigidez arterial.
Lo primero que se recomienda es dejar de fumar y en personas
con enfermedad coronaria consumir variedad de pescado y al menos dos
veces por semana.
- Los fibratos, medicamentos para bajar el colesterol, pueden afectar la salud de los riñones.
Causa un aumento de la creatinina sérica hasta del 50% en uno de cada
10 usuarios. Si es recetado hay que vigilar de cerca el riñón y parar
la medicación si este falla. Si es que ya lo decimos aquí, las drogas no son buenas salvo para los camellos que te las venden!!
- El consumo de café puede ayudar en el síndrome del ojo seco.
Ya que estimula las glándulas lagrimales y por lo tanto la capacidad
del ojo para producir lágrimas, bien es sabido, que aumenta otras
secreciones como la saliva y los jugos digestivos.
- El orégano protege frente al cáncer de próstata.
El carvacrol, un componente de orégano induce la muerte celular
programada en las células cancerosas. Sabíamos de sus propiedades
anti-bacterianas y anti-inflamatorias, pero este nuevo descubrimiento lo
convierte en una super especia.
Suena bien, buenas noticias, verdad?!?! ¿A que te apetece un chocolate con café y orégano (o menta) ?
Listado de frutas y su contenido en fructosa
La fructosa es dos veces más dulce que la sacarosa.
El extracto que se puede comprar en cristales y que imita perfectamente al azúcar de mesa se extrae del maíz.
Un consumo excesivo de fructosa puede ser especialmente tóxico para el
hígado porque es el encargado de metabolizar ese azúcar y lo hace de un
modo parecido al alcohol, por eso no es extraño que las
personas que consumen refrescos y zumos de frutas envasados tengan
mayor riesgo de padecer hígado graso de tipo no alcohólico.
La fructosa no es tan benigna como se creía, avisadas quedan esas madres
que no hacen más que darles zumos de frutas a sus hijos en vez de la
fruta al natural con toda su fibra.
Un exceso en el consumo de fructosa puede producir:
- Riesgo de diabetes tipo 2
- Aumentan la hipertensión
- Niveles de triglicéridos, especialmente en diabéticos
- Resistencia a la insulina
- Obesidad
En personas intolerantes a la fructosa, cifra que llega hasta más del
33% de la población, causa los mismos síntomas que el síndrome del
intestino irritable:
- Fatiga, desnutrición
- Flatulencias
- Dolor abdominal y cólicos
- Diarrea
En la lista solo se ha tenido en cuenta la cantidad de fructosa, pero no
el contenido en sacarosa, y/o azúcares totales, así es fácil darse
cuenta que una fruta aunque tenga bajo contenido en fructosa debe su
sabor dulce a la sacarosa. No hay mejor listado para evitar el exceso de
azúcares que dejarte llevar por tu paladar, si es excesivamente dulce
sabrás que tienes que ser muy moderado.
Personas con resistencia a la insulina, síndrome metabólico y diabetes tipo 2,sobrepeso o niveles elevados de trigicéridos deben limitar el consumo de frutas (uvas, plátanos, mangos, cerezas, manzanas, piñas, peras y kiwis) y consumir verduras en su lugar y también optar por frutas como tomates, aguacates, limones y limas que son muy bajos en azúcares totales y no tienen necesidad de ser restringidos.
Por cierto, en la encuesta que hicimos preguntando: ¿Que crees, la fruta engorda o no?
Obtuvimos los siguientes resultados:
Está claro que la gran mayoría de las 321 personas que respondieron
están al corriente de la influencia que tienen los azúcares así sean de
fruta como de cualquier otro alimento, frente al problema de la
obesidad. Muchas gracias por haber respondido y al 18,07% que quería una
lista, aquí tienen la primera parte.
Y como últimamente no paro de encontrar informaciones sobre obesidad (parece la época ideal)
no tengo claro si es un tema interesante para seguir tratando o
realmente en este blog ya hemos superado el tema del exceso de kilos y
nos preocupan cosas más específicas, así que espero me ayudes a
aclararme y definir cual es la información que buscas y necesitas.
Y ahora voy a mordisquear algo de coco, que escribir sobre comida abre el apetito!!
¿Es la vitamina D la cura al dolor crónico?
La vitamina D que se forma en la piel cuando te expones al sol puede ser
la clave para tratar un dolor crónico que no consigues calmar con
anagésicos.
Para llevar una vida saludable se necesitan varios nutrientes, pero uno
de las más esenciales y casi olvidados es la vitamina D.
Primero con la moda de los desnatados y el consiguiente miedo a la grasa, al que se unió el miedo a la exposición solar han
sido los causantes de que lo habitual sean niveles muy bajos de
vitamina D en todo tipo de personas pero especialmente en niños y
ancianos.
En países como India donde la cantidad de sol es más que suficiente para tener unos adecuados niveles de vitamina D es habitual una deficiencia de vitamina D causada por una nutrición deficiente con dietas bajas en grasa.
Sólo tienen el 10% de la vitamina D disponible a través de fuentes
alimenticias en su dieta alta en hidratos y que adolece de ácidos
grasos.
La vitamina D es soluble en grasa y
está presente en pocos alimentos, de fuentes vegetales se obtiene en
forma D2, y de fuentes animales obtenemos la vitamina D3 (colecalciferol).
Una vez entra en el torrente sanguíneo es metabolizada en hígado
y riñón para activar las hormonas que aumentan la absorción de calcio,
aumentando así la (bio) disponibilidad de calcio.
En el hígado, la vitamina D se convierte en 25-hidroxi colecalciferol o
25 D (OH), que se convierte luego en el riñón a 1, 25 D (OH).
El fósforo absorbido en el intestino y la hormona
proteica paratiroidea secretada por la glándula paratiroides regulan la
cantidad que produce el riñón y con ello se regula el metabolismo del
calcio y la cantidad absorbida de este, normalizando los niveles de
calcio en sangre.
Si tenemos esto en cuenta es
más importante la cantidad de vitamina D que tengas en sangre para
activar las hormonas que la cantidad de calcio que puedas consumir y que no se asimila sin las condiciones hormonales adecuadas.
La deficiencia de vitamina D está asociada al síndrome metabólico,
diabetes de tipo 1, enfermedades del corazón, huesos frágiles e
osteoporosis, fracturas, infecciones e incluso cáncer.
Los estudios más recientes asocian los bajos niveles de vitamina D con
diversos síndromes de dolor crónico, dolores musculares en las piernas
de ancianos, neuropatía postherpética, enfermedad de células falciformes, dolores de cabeza, dolor en las articulaciones, dolor de espalda crónico, dolor difuso muscular y/u óseo.
Sobre todo no olvides que para
obtener buenos niveles de vitamina D de forma natural no es suficiente
con la exposición solar, la dieta debe contener grasa para poder
metabolizar esa vitamina D.
Más información:
Vitamin D Council