“Estos ataques demuestran los intentos por fracturar nuestra e ir contra nuestro país”, aseguró Del Pino al
latinoamericano Telesur desde Washington, donde participa en el Consejo
Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Del Pino calificó de “muy grave la nueva injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos de Venezuela, al quedar reveladas las actividades de espionaje realizadas por ese país a la principal industria nacional”.
El ministro, que es además presidente de PDVSA, aseguró que han “reclamado al Gobierno norteamericano por las entrevistas a las que son sometidos” sus empleados cuando acuden a la embajada estadounidense a solicitar visado para asistir a actividades de en EE.UU.
“Hace un par de años se reveló, a través de WikiLeaks, que esas entrevistas luego son transmitidas desde aquí (a Estados Unidos). Se trata de preguntas sobre nuestras realidades comerciales, sobre nuestras estrategias”, apuntó.
Resaltó que esta acción es “un espionaje industrial” que han reclamado anteriormente y que, dijo, “ahora se demuestra con este informe”.
El Gobierno venezolano entregó hoy una nota de protesta al encargado de negocios de la embajada de EE.UU. en Caracas, Lee Mclenny -su máxima representación diplomática en el país- por parte del viceministro de Exteriores para América del Norte, Alejandro Fleming, según difundidas por la Cancillería venezolana.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó ayer, miércoles, la revisión “integral” de las relaciones que mantiene su país con EE.UU. y la notificación formal de la protesta de su gobierno contra el supuesto espionaje revelado en la misma jornada por Snowden.
El documento de Snowden , publicado ayer por Telesur, afirma que la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA) espió a cientos de directivos de PDVSA, entre ellos a su expresidente Rafael Ramírez.
El texto, según Telesur, fue redactado por un agente cuya identidad no fue revelada, pero quien sería el encargado del espionaje a la petrolera venezolana.
Al mismo tuvo acceso el ex analista estadounidense, asilado actualmente en Rusia.
El documento indica que fue recogida información privada de al menos 10.000 perfiles de empleados de PDVSA, lo que incluye direcciones de correos electrónicos y números de teléfono, entre ellos el de Ramírez que presidió la estatal venezolana entre 2004 y 2014, y que actualmente es el representante de Venezuela en la ONU.
Asimismo, el exagente asegura que tuvo acceso a información de otros 900 perfiles que incluía, entre otros datos, contraseñas de correo electrónico y usuarios.
El analista señala que para su labor, llevada a cabo a finales de 2010, se mantuvo en coordinación con las agencias de inteligencia y seguridad de EE.UU. y “con Caracas”.
En el texto afirma, asimismo, que “entender PDVSA es entender el corazón económico de Venezuela”.
Venezuela y EE.UU. mantienen sus relaciones diplomáticas sin embajadores desde 2010.
EFE
Del Pino calificó de “muy grave la nueva injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos de Venezuela, al quedar reveladas las actividades de espionaje realizadas por ese país a la principal industria nacional”.
El ministro, que es además presidente de PDVSA, aseguró que han “reclamado al Gobierno norteamericano por las entrevistas a las que son sometidos” sus empleados cuando acuden a la embajada estadounidense a solicitar visado para asistir a actividades de en EE.UU.
“Hace un par de años se reveló, a través de WikiLeaks, que esas entrevistas luego son transmitidas desde aquí (a Estados Unidos). Se trata de preguntas sobre nuestras realidades comerciales, sobre nuestras estrategias”, apuntó.
Resaltó que esta acción es “un espionaje industrial” que han reclamado anteriormente y que, dijo, “ahora se demuestra con este informe”.
El Gobierno venezolano entregó hoy una nota de protesta al encargado de negocios de la embajada de EE.UU. en Caracas, Lee Mclenny -su máxima representación diplomática en el país- por parte del viceministro de Exteriores para América del Norte, Alejandro Fleming, según difundidas por la Cancillería venezolana.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó ayer, miércoles, la revisión “integral” de las relaciones que mantiene su país con EE.UU. y la notificación formal de la protesta de su gobierno contra el supuesto espionaje revelado en la misma jornada por Snowden.
El documento de Snowden , publicado ayer por Telesur, afirma que la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA) espió a cientos de directivos de PDVSA, entre ellos a su expresidente Rafael Ramírez.
El texto, según Telesur, fue redactado por un agente cuya identidad no fue revelada, pero quien sería el encargado del espionaje a la petrolera venezolana.
Al mismo tuvo acceso el ex analista estadounidense, asilado actualmente en Rusia.
El documento indica que fue recogida información privada de al menos 10.000 perfiles de empleados de PDVSA, lo que incluye direcciones de correos electrónicos y números de teléfono, entre ellos el de Ramírez que presidió la estatal venezolana entre 2004 y 2014, y que actualmente es el representante de Venezuela en la ONU.
Asimismo, el exagente asegura que tuvo acceso a información de otros 900 perfiles que incluía, entre otros datos, contraseñas de correo electrónico y usuarios.
El analista señala que para su labor, llevada a cabo a finales de 2010, se mantuvo en coordinación con las agencias de inteligencia y seguridad de EE.UU. y “con Caracas”.
En el texto afirma, asimismo, que “entender PDVSA es entender el corazón económico de Venezuela”.
Venezuela y EE.UU. mantienen sus relaciones diplomáticas sin embajadores desde 2010.
EFE