Elizabeth Aguilera Vegas, la dirigente
comunitaria del PSUV (el mayor de los partidos del chavismo) asesinada a
tiros en un sector popular de Caracas, fue sometida a “crueles
torturas” por los sicarios que luego le dispararon y quemaron su cuerpo
la noche del pasado lunes.
Así lo reveló en su cuenta de la red
social twitter el periodista Wilmer Poleo Zerpa, coordinador de la
fuente de sucesos en el capitalino diario Ultimas Noticias.
En una serie de seis mensajes Poleo
precisó detalles sobre el crimen que ha conmovido a la capital
venezolana y ha llenado de indignación a la militancia del base del
chavismo.
Uno de los detalles indica que quienes
ordenaron el asesinato fueron los sujetos apodados "El Coqui" y "El
Gordo", quienes dirigen las bandas criminales paramilitarizadas que
operan en los barrios de la Cota 905, un denso sector de colinas con
viviendas informales localizado muy cerca del centro de Caracas.
Asimismo Poleo denunció que tras
conocerse el asesinato “ni un solo policía subió a la Cota 905” y que
los familiares de Aguilera fueron obligados por los mismos delincuentes a
abandonar el sector, mientras que su esposo era buscado para también
asesinarlo.
Finalmente, en el último mensaje sobre
el tema el periodista informó que fuentes policiales confiables le
habían referido que el delincuente apodado El Coqui (Carlos Luis
Revette) actuaba como confidente de las autoridades y que por ese motivo
la policía no ingresaba a sectores de la Cota 905.