Posted: 19 Jun 2018 11:30 AM PDT
Palestinos lloran ante el cuerpo de un joven asesinado por las fuerzas de guerra israelíes, en la ciudad de Gaza 18 de junio de 2018. |
Siguiendo con la venta de armas a Israel, el Reino Unido es cómplice de ese régimen en la represión violenta contra los palestinos, denuncia el grupo War on Want. “Mientras el mundo exige que se terminen los ataques violentos contra los palestinos, el Gobierno del Reino Unido continúa aprobando la exportación de armas a Israel, convirtiéndose en cómplice de la violencia”, ha dicho este lunes la activista antiguerra Ryvka Barnard del grupo War on Want, dedicado a la lucha contra la pobreza, la desigualdad y la injusticia.
En declaraciones al diario británico The Independet, Barnard ha arremetido contra el Gobierno del Reino Unido por haberse abstenido en la reciente votación de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) sobre el uso excesivo de la fuerza por parte del régimen de Israel contra los palestinos en la Franja de Gaza y la ocupada Cisjordania.
La abstención de Londres se sumó a otras 44, que junto a 8 votos en contra, no tuvieron repercusión en los resultados de la votación, que dio lugar a la aprobación de una resolución contra el régimen israelí, con 120 votos a favor.
Mientras el mundo exige que se terminen los ataques violentos contra los palestinos, el Gobierno del Reino Unido continúa aprobando la exportación de armas a Israel, convirtiéndose en cómplice de la violencia”, dice la activista antibelicista Ryvka Barnard delgrupo War on Want, dedicado a la lucha contra la pobreza, la desigualdad y la injusticia.
De acuerdo con el Ministerio palestino de Salud, un total de 135 palestinos han muerto y otros 14 700 han sufrido heridas, como consecuencia de la violencia ejercida por las fuerzas de guerra israelíes durante las protestas palestinas —iniciadas el 30 de marzo— para reclamar el derecho al retorno de los refugiados palestinos a su patria.
Barnard, a este mismo respecto, ha citado a los testigos en las protestas palestinas, según quienes, varios manifestantes fueron disparados sin que hubieran representado una amenaza, arrojado piedras o intentado dañar a los soldados israelíes.La exportación de armas, en particular a Israel y Arabia Saudí, siempre ha sido una política británica criticada por los grupos pro derechos humanos que acusan a Londres de provocar las guerras en el mundo.
A este respecto, la página web Middle East Eye reveló en abril que el Gobierno de Londres había vendido armas por un valor superior a los 445 millones de dólares al régimen de Israel en un periodo de tan solo tres años.
hispantv