Mike Johnson pidió por carta al presidente ucraniano que despida a su embajadora en Washington, Oksana Markarova. En la misiva, Johnson argumenta que la reciente visita del líder ucraniano a una planta de municiones en Pensilvania, organizada por Markarova, tenía características de un evento político partidista, lo que considera una injerencia electoral en el contexto de las próximas elecciones en Estados Unidos. Johnson destacó que la visita no incluyó representantes republicanos y fue claramente diseñada para beneficiar a los demócratas. Esto, según él, ha erosionado la confianza en la capacidad de Markarova para desempeñarse como diplomática efectiva en un momento en que todas las naciones deberían evitar interferir en la política estadounidense. Coincidiendo con esta demanda, el Comité de Supervisión y Rendición de Cuentas de la Cámara de Representantes ha iniciado una investigación sobre el uso de recursos públicos para facilitar la visita de Zelensky a Pensilvania, considerando que se utilizó para hacer campaña a favor de la vicepresidenta Kamala Harris. El comité busca determinar si hubo alguna coordinación entre la Administración Biden-Harris y el gobierno de Pensilvania respecto a este asunto.
