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Serguei Lavrov, ministro de Exteriores ruso.
El
ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, afirma que Estados Unidos
pidió a Rusia que no bombardease a los terroristas del Frente Al-Nusra,
la filial de Al-Qaeda en Siria.
"Nos están diciendo que no golpeemos (al Frente Al-Nusra), porque está la oposición ‘normal’ al lado", dijo el viernes Lavrov durante una entrevista televisada, en referencia a los socios estadounidenses.No obstante, indicó el titular ruso, Moscú lleva insistiendo desde hace tiempo que los grupos de la llamada oposición "moderada", respaldados por EE.UU., han de abandonar las zonas ocupadas por el Frente Al-Nusra y distanciarse de ellos.
Nos están diciendo que no golpeemos (al Frente Al-Nusra), porque está la oposición ‘normal’ al lado", dijo el viernes Lavrov durante una entrevista televisada, en referencia a los socios estadounidenses.Añadió que aunque actualmente Moscú y Washington mantienen un estrecho diálogo sobre la forma de asegurar el alto el fuego en Siria, la lucha contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) y el Frente Al-Nusra debe de ser la prioridad.
Washington, por su parte, matizó el viernes que únicamente busca que Rusia "seleccione cuidadosamente" sus objetivos para evitar que los ataques acaben con la vida de civiles y grupos opositores "legítimos". El portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Mark Toner, indicó que el secretario de ese Departamento, John Kerry, enfatizó la necesidad de separar a estos grupos durante una conversación con Lavrov.
Después de insistir a Washington que mediase con los grupos opositores que apoya para que se retirasen de las zonas que controlan los terroristas de Al-Qaeda y de recibir peticiones de los grupos armados para no ser bombardeados, Rusia anunció una fecha límite para que las fuerzas de la oposición se retirasen de los territorios ocupados por Al-Nusra.
Desde el 27 de febrero, en Siria rige un alto el fuego, del que están excluidos el grupo takfirí de Daesh y el Frente Al-Nusra. Sin embargo, el estallido de la violencia y diferentes conflictos han hecho tambalear el armisticio.
