Abel
Moya, deportista cubano que solicitó hace un año –sin conseguirlo- el
asilo político en Madrid, lleva meses viviendo en la calle y pidiendo
limosna (1) (2). Es la misma historia de autoengaño de muchos de los
supuestos “disidentes” que, en 2010, llegaron a territorio español por
un acuerdo entre Cuba, España y la Iglesia Católica (3). Tras agotar las
ayudas –recordemos- algunas de aquellas personas acabaron viviendo en
la calle (4). Pero ¿lo han leído en alguno de los grandes diarios
españoles? ¿A que no?
En agosto pasado fue asesinado a balazos Fabio Melanitto, un famoso cantante y actor de Venezuela
(5). Se publicaron decenas de noticias en la prensa latinoamericana,
especialmente la del corazón (6). Todas centradas en el caso, sin
referencias a la situación de violencia del país, donde hay 93
asesinatos al día (7). ¿Y saben por qué? Porque el venezolano no fue
asesinado en su patria, sino en México.
Según la ONG Global Witness, en 2017, al menos 207 personas (ambientalistas, líderes indígenas…) fueron asesinadas en el mundo por su lucha frente a proyectos mineros
o agroindustriales (8). De ellas 57 fueron en Brasil, país que encabeza
el ranking (9). ¿Lo han leído en alguno de los medios que nos informan
tan detalladamente sobre Nicaragua o Venezuela?
De los más de 200 conflictos relacionados con actividades mineras en América Latina, el 90% está protagonizado por empresas de Canadá
que, en complicidad con ciertos gobiernos, pisotean los derechos y
provocan la expulsión forzada de algunas poblaciones locales (10). ¿Lo
sabían? ¿Lo han leído en alguno de los grandes diarios?
Leemos:
“cada día, miles de personas se acercan a comedores populares o
parroquias (…) para pedir comida. Otras rebuscan entre la basura”. “La
situación ha empeorado (…) desde el pasado abril, cuando” la moneda
“comenzó a depreciarse y volvió a desbocar la inflación” (11). ¿Hablará
este reportaje sobre Venezuela? Pues no. Es sobre Argentina que, a
diferencia del primer país, no sufre un bloqueo a sus finanzas (12). Al
contrario: el Fondo Monetario Internacional le ha prestado 57.000
millones de dólares (13). Pero la pobreza, el desempleo, la inflación y las protestas en Argentina no pasan de generar frías informaciones, sin el menor análisis crítico sobre la política neoliberal de Mauricio Macri (14).
Porque,
para condenar a gobiernos por las consecuencias no de su política, sino
de las sanciones impuestas por los matones que mandan en el mundo ya
tenemos… a los de Cuba (15) y Venezuela (16).
Presentación: Lázaro Oramas. Edición: Esther Jávega.
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